Acusa clero impunidad de políticos

La Arquidiócesis Primada de México acusó a los políticos de utilizar impunemente el voto ciudadano para satisfacer intereses particulares y de grupo a través del enriquecimiento ilícito y la corrupción.

En el editorial del semanario "Desde la fe", señaló que los partidos utilizan el voto para legitimar una lucha encarnizada por el poder y el enriquecimiento a costa del atraso en el progreso del País.

"La sociedad está cansada de la mediocridad parlamentaria, del autoelogio de los gobernantes, del derroche escandaloso para crear imagen y difundir logros gubernamentales, de las miles de excusas ante la ineptitud.

"De que, pese a la evidencia del abuso de poder, el enriquecimiento ilícito y la corrupción, simplemente no pase nada. Y es que los poderosos saben que cuentan con un manto de impunidad", publicó la Arquidiócesis encabezada por el Cardenal Norberto Rivera.

Agregó que la mayoría de los miembros de la clase política recurre a la demagogia, con la que pretende engañar a la población y hacerle creer que busca el bien común.

"En realidad las reformas o cambios que proponen obedecen a intereses de grupos económicos o de poder, buscando salvaguardar e incrementar sus privilegios sin importarles realmente el pueblo, ese pueblo que les confió el gobierno con la única finalidad de alcanzar el progreso y la justicia social", se indica en el texto "Políticos a la altura".

El Arzobispado de México llamó a los que serán los próximos representantes políticos a desatorar las reformas estructurales pendientes y a comprometerse con el progreso y la implantación de la justicia.

"Que no cejen en buscar una forma adecuada en combatir al crimen organizado, respetando los derechos humanos y buscando resarcir el tejido social, desgarrado no sólo por la violencia física, sino por la discordia y el encono ideológico y social que no permite la reconciliación, ni la paz", exhortó.

Asimismo, en su editorial llamó a evitar que el ejercicio de la política se reduzca a una "vulgar rebatinga" de intereses económicos e ideologías débiles.

Reforma, 27 de agosto.