Insta Ebrard a hacer más eficiente la defensa de los derechos humanos

El jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard Casaubon, reconoció que la defensa de los derechos humanos está condenada a no pasar del discurso, si no se cuenta con un gobierno eficiente para servir a los ciudadanos. “Tenemos que contar con un gobierno más eficiente, menos caro, menos oneroso en tiempo y en discrecionalidad para la gente”, dijo el mandatario capitalino, quien señaló que para ello los derechos humanos “tienen que dejar de ser un discurso y empezar a ser un programa”.

Además de simplificar trámites o mejorar procesos, señaló, es necesario reorganizar la administración pública para lograr objetivos distintos de los que se planteaban para la sociedad hace décadas.

Llevar a cabo esta reorganización requiere métodos; modernización de sistemas de información, páginas de Internet y revisar la cultura de servicio público, “porque ahora tenemos una eficiencia distinta; no puede haber modernización de la administración pública si no tenemos transparencia efectiva para los ciudadanos, los medios de comunicación y para todo el mundo” agregó.

Ebrard Casaubon dijo lo anterior al inaugurar el foro Innovación y Modernización Gubernamental, cuyo objetivo será buscar alternativas para la competitividad del país y la zona metropolitana del valle de México y al cual, aunque estuvieron invitados varios gobernadores, entre ellos el del estado de México, Enrique Peña Nieto; el de Morelos, Marco Antonio Adame Castillo, y el de Hidalgo, Miguel Ángel Osorio Chong, sólo asistió el de Guerrero, Carlos Zeferino Torreblanca Galindo.

Exhortó a todos los responsables de gobierno a realizar un esfuerzo para hacer más eficientes sus instancias, pues el tiempo se agota para la solución de muchos de los problemas, como es la falta de educación para una población con promedio de edad cada vez mayor. Ejemplificó con el hecho de que 70 por ciento de los jóvenes que actualmente debieran ser preparatorianos o bachilleres no lo son.

“En 15 años vamos a tener otro perfil demográfico en el país. Hoy, en la ciudad de México el promedio de edad es de 25 años, pero en 15 años será de 30. Eso cambia todo porque hace irremediable lo que ya no hagamos hoy. ¿A cuáles jóvenes vamos a educar entonces, si ya no tendrán edad para ingresar a preparatoria o educación superior?”, insistió.

Indicó que el tema atañe también a la ciudad y por ello se ha hecho un esfuerzo por adoptar a la actual generación de jóvenes, y también tendría que hacerse a nivel del país, al tiempo que deben atenderse otros problemas, como el cambio climático, que ya provoca una alteración en la pauta de lluvias y, por lo menos este año y el siguiente, una escasez de agua en la capital de la República.

Además deben aplicarse otras bases para el gasto y temas como la equidad de género deben hacerse de modo transversal, cuantificable y transparente, para evitar acciones limitadas a una sola instancia, sino que sean extensivas a todos los órganos de gobierno.

Se requiere la modernización del Estado, pues de otro modo persistirá el abismo entre los propósitos que los gobernantes dicen perseguir y la realidad presupuestal y operativa de la administración, concluyó.

Acompañaron al jefe de Gobierno en este acto el director del Cinvestav, René Asomoza Palacio, y el secretario de la Función Pública del gobierno federal, Salvador Vega.

Bertha Teresa Ramírez, La Jornada, 11 de agosto.