SANTIAGO.- Colombia pedirá al Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA) que aborde lo que denominan el "proyecto expansionista" del Mandatario de Venezuela, Hugo Chávez, informó ayer en Santiago el Canciller colombiano, Jaime Bermúdez.
"Le hemos pedido a nuestro Embajador en la OEA (Luis Alfonso Hoyos) que lleve este tema al Consejo Permanente", dijo a la prensa Bermúdez, quien cumple una visita oficial en Chile.
El Canciller recordó que su Gobierno rechazó expresiones de Chávez, quien el domingo dijo que su par colombiano, Álvaro Uribe, se fijó como tarea "impedir que el chavismo llegue a Colombia".
"Emitimos un comunicado rechazando las pretensiones de expansionismo en Colombia, que, además, va (en) contra de la no intervención en asuntos internos", añadió.
Más temprano, desde Bogotá, el Embajador Hoyos también había abordado el tema.
"(El Gobierno de Uribe) repelerá todas las acciones del proyecto expansionista en Colombia ratificado públicamente por Chávez. De ninguna manera se puede tolerar que se insulte a los colombianos de bien", declaró.
El diplomático indicó que la intención de Colombia es dejar sentado ante la OEA las declaraciones de Chávez como un elemento de injerencia en los asuntos internos de su país y así dejar notificado el malestar de Bogotá. Hoyos precisó que su Gobierno no busca que el organismo hemisférico tome alguna medida.
"Frente a los insultos no diremos nada. No queremos que esto escale, pero Chávez siempre dice que no acepta intervención en asuntos internos (venezolanos, entonces) que practique lo que predica", indicó.
La postura colombiana será presentada mañana en la reunión ordinaria de Embajadores de la OEA en Washington.
Venezuela, por su parte, calificó de fantasiosa la reacción de la delegación colombiana.
"Llama la atención la curiosa naturaleza de ese documento, donde se insertan expresiones fantasiosas y emotivas en respuesta a un mensaje de paz del Presidente Chávez", informó la Cancillería venezolana.
La declaración del Gobierno de Uribe salió al paso de afirmaciones hechas el domingo por Chávez indicando que tenía el derecho de dirigirse al pueblo colombiano.
"Hay que hacer todo lo posible para que mi palabra llegue a los colombianos. La oligarquía de allá tiene miedo de este mensaje. Hay que hacerlo por todos los medios porque nos quieren asociar con la guerrilla", aseguró Chávez en su programa "Aló, Presidente".
Además, el 16 de agosto, el Mandatario publicó un aviso en diarios de Colombia en el que criticaba el reciente acuerdo militar colombo-estadounidense.
Las relaciones entre Venezuela y Colombia se congelaron luego de que Chávez advirtiera sobre la posibilidad de "vientos de guerra" en la región por el pacto mediante el cual Bogotá permitirá a Washington usar hasta siete bases militares en su territorio.
La exigencia de Chávez para tratar este tema derivó en una reunión presidencial extraordinaria de la Unasur, que se llevará a cabo este viernes en Argentina.
"Le hemos pedido a nuestro Embajador en la OEA (Luis Alfonso Hoyos) que lleve este tema al Consejo Permanente", dijo a la prensa Bermúdez, quien cumple una visita oficial en Chile.
El Canciller recordó que su Gobierno rechazó expresiones de Chávez, quien el domingo dijo que su par colombiano, Álvaro Uribe, se fijó como tarea "impedir que el chavismo llegue a Colombia".
"Emitimos un comunicado rechazando las pretensiones de expansionismo en Colombia, que, además, va (en) contra de la no intervención en asuntos internos", añadió.
Más temprano, desde Bogotá, el Embajador Hoyos también había abordado el tema.
"(El Gobierno de Uribe) repelerá todas las acciones del proyecto expansionista en Colombia ratificado públicamente por Chávez. De ninguna manera se puede tolerar que se insulte a los colombianos de bien", declaró.
El diplomático indicó que la intención de Colombia es dejar sentado ante la OEA las declaraciones de Chávez como un elemento de injerencia en los asuntos internos de su país y así dejar notificado el malestar de Bogotá. Hoyos precisó que su Gobierno no busca que el organismo hemisférico tome alguna medida.
"Frente a los insultos no diremos nada. No queremos que esto escale, pero Chávez siempre dice que no acepta intervención en asuntos internos (venezolanos, entonces) que practique lo que predica", indicó.
La postura colombiana será presentada mañana en la reunión ordinaria de Embajadores de la OEA en Washington.
Venezuela, por su parte, calificó de fantasiosa la reacción de la delegación colombiana.
"Llama la atención la curiosa naturaleza de ese documento, donde se insertan expresiones fantasiosas y emotivas en respuesta a un mensaje de paz del Presidente Chávez", informó la Cancillería venezolana.
La declaración del Gobierno de Uribe salió al paso de afirmaciones hechas el domingo por Chávez indicando que tenía el derecho de dirigirse al pueblo colombiano.
"Hay que hacer todo lo posible para que mi palabra llegue a los colombianos. La oligarquía de allá tiene miedo de este mensaje. Hay que hacerlo por todos los medios porque nos quieren asociar con la guerrilla", aseguró Chávez en su programa "Aló, Presidente".
Además, el 16 de agosto, el Mandatario publicó un aviso en diarios de Colombia en el que criticaba el reciente acuerdo militar colombo-estadounidense.
Las relaciones entre Venezuela y Colombia se congelaron luego de que Chávez advirtiera sobre la posibilidad de "vientos de guerra" en la región por el pacto mediante el cual Bogotá permitirá a Washington usar hasta siete bases militares en su territorio.
La exigencia de Chávez para tratar este tema derivó en una reunión presidencial extraordinaria de la Unasur, que se llevará a cabo este viernes en Argentina.
AP y AFP, Reforma, 25 de agosto.
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