A principios de 2005 comenzó a circular la información en el sentido de que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes preparaba un paquete aproximado de 260 concesiones en todo el país, tras diez años de no otorgarlas, al menos abiertamente. Se mencionó que el presidente Vicente Fox era el primer interesado en otorgarlas y que el cabildeo para ello se estaba haciendo directamente desde la residencia oficial de Los Pinos. Cuando tomó forma el ofrecimiento, se suscitaron diversas reacciones por parte de los concesionarios: se habló de los posibles beneficiados, de la situación de las estaciones de Amplitud Modulada y de lo complicado del panorama para la publicidad. Se discutió sobre el rezago tecnológico y las características del espectro tecnológico. Esto es lo que, en resumidas cuentas, se presenta en esta entrega: 26 comentarios que dan cuenta de este escenario contextualizado por la reforma a la Ley Federal de Radio y Televisión, la convergencia tecnológica y los intereses de los industriales al interior de la radiodifusión privada. La información se presenta a continuación; el comentario inicial, de Marco Antonio Mares, detalla qué son las estaciones “combo” y la vigencia de su fundamento legal. Lo que sigue es la discusión sobre el tema, narrada indirectamente por columnistas y articulistas.
El experto en telecomunicaciones, ex presidente de la Comisión Federal de Telecomunicaciones e integrante del Instituto al Derecho de las Telecomunicaciones (IDET), Javier Lozano Alarcón, denuncia que se planea desde Los Pinos la creación de un número cercano a 250 “combos” de igual número de concesionarios de AM (Amplitud Modulada) que, por la puerta de atrás, pretenden obtener una concesión silenciosa de FM (Frecuencia Modelada) sin seguir el procedimiento al que se refiere el título tercero, capítulo primero, de la Ley Federal de Radio y Televisión. Sería un cambio radical en la entrega de concesiones pues en la administración de Ernesto Zedillo no se otorgó concesión alguna.
Los “combos” —asevera Lozano Alarcón— es una simulación para evadir el procedimiento público previsto en la Ley. Desde Los Pinos —advierte— se pretende otorgar estaciones de FM a quienes ya tienen una AM, o sea, las llamadas “combos”. Denominan “combos” a una fórmula, que permitió, hace más de 10 años, otorgar nuevas estaciones de Frecuencia Modulada (FM) a quienes tenían frecuencias de Amplitud Modulada (AM) en la radio. Se trata de una determinación administrativa, concretamente del Secretario de Comunicaciones y Transportes, de permitir la transmisión del mismo contenido de una estación de AM ya concesionada en una nueva de FM.
Lo absurdo es que no tiene ningún fundamento legal. En el pasado la base fue el artículo 22 de la Ley Federal de Radio y Televisión que dice: “No podrán alterarse las características de la concesión sino por resolución administrativa en los términos de esta ley o en cumplimiento de resoluciones judiciales”. Fue así que, so pretexto de que se trataba de una característica más dentro de la concesión radiofónica correspondiente, se asignaron, sin seguir el procedimiento de la ley, canales de transmisión en FM a quien ya tenía alguna concesión en AM. Y, por si fuera poco, ni siquiera se les otorgó a todos los concesionarios su canal espejo en FM sino que fue absolutamente selectivo. El más interesado de que se creen y entreguen las “combos” es Vicente Fox y desde donde se estaría operando es desde la oficina de Ramón Muñoz. La SCT —apunta Lozano Alarcón— lo ha explorado y lo ha visto con simpatía.
Marco Antonio Mares, “Ricos y Poderosos”, Crónica, 8 de marzo.
Hay quienes parecería que nada les acomoda. Durante muchísimo tiempo criticaron al Secretario de Comunicaciones y Transportes, Pedro Cerisola, porque no estaba dando concesiones para nuevas estaciones de radio (es importante destacar que desde tiempos de Carlos Ruiz Sacristán no se ha realizado ningún procedimiento de este tipo) y ahora que la subsecretaría de comunicaciones, bajo el mando de Jorge Álvarez Hoth, está abriendo este procedimiento como un medio de orden y cumplimiento de la ley han comenzado a criticar el procedimiento y a tejer una larga cantidad de historias. Lo cierto es que la fórmula encontrada por la SCT es la correcta, puesto que reconoce cuál es la realidad y con el procedimiento en marcha lo que se está buscando es encontrar una salida conveniente para todas las partes...
David Páramo, “Hombres de Nombre”, El Economista, 10 de marzo.
Hay empresarios como Francisco González y Olegario Vázquez Raña que en el sexenio han hecho hasta lo imposible con Vicente Fox y Martha Sahagún de Fox para obtener un canal. Por otro lado podría estar el PRD. El Canal 40 se caracterizó en su línea editorial por favorecer a este partido, alianza que tendría todavía mayor valor en épocas electorales para lo que será la causa de Andrés Manuel López Obrador. No hay nada escrito, puesto que la vía del concurso mercantil también es posible e incluso la quiebra, aunque en este último caso sí se motivaría la cancelación automática de la concesión a Televisión del Valle de México.
Alberto Aguilar, “Nombres, nombres y nombres”, Reforma, 23 de mayo.
MÁS VALE que alguien tenga a la mano un extinguidor, porque hoy se van a calentar los bulbos en la sesión del consejo directivo de la Cámara de la Industria de Radio y Televisión.
DICEN QUE la tradicional unidad de los concesionarios radiofónicos y televisivos estará a prueba debido a un asunto que los trae locos: la apertura de nuevas concesiones de radio.
SE SABE que el gobierno foxista trae entre manos el otorgamiento de algo así como 300 concesiones para darle entrada a nuevos jugadores, lo que no ha caído bien entre los actuales concesionarios.
CUENTAN QUE algunos se oponen a esa apertura, porque no quieren que haya nuevos competidores. Según esto, Televisa y Televisión Azteca están en plan de cancerberos y no quieren dejar pasar a uno solo.
DEL OTRO LADO están los dueños de grandes grupos radiofónicos que sí quieren que se entreguen nuevas concesiones... ¡pero a ellos mismos!
QUIENES tienen la encomienda de sacar adelante el proyecto son el subsecretario de la SCT, Jorge Álvarez Hoth, así como Ramón Muñoz y el subsecretario de Gobernación, Enrique Aranda. ASÍ QUE no le cambie de canal... o de estación.
Fray Bartolomé, “Templo Mayor”, Reforma, 9 de agosto.
YA TRASCENDIÓ EL proyecto que se tiene en SCT, que encabeza Pedro Cerisola, para autorizar un muy importante paquete de nuevas concesiones de radio. Se habla de hasta 250 en todo el País, básicamente de FM.
Con éste se buscaría concluir un largo periodo de sequía de hasta 11 años en la entrega de concesiones radiofónicas, esto tras la ausencia de las mismas en la administración de Ernesto Zedillo y lo que va del régimen de Vicente Fox.
Como era de esperarse, hay legisladores de todos los partidos que se oponen a su entrega. Se esgrime la falta de transparencia y los posibles amarres políticos que con ello se generarían, máxime la cercanía de la contienda política más importante del País.
Se hace ver además que dicho tema había quedado condicionado al impulso de una nueva ley de radio y TV que, como es público, tampoco logró traspasar la barrera de los grandes intereses que se reflejan en el Congreso.
En ese terreno el mayor avance sexenal tiene que ver con el renovado formato de los refrendos de las concesiones que ha otorgado SCT en esta administración desde finales del 2001. En éste se exigieron al concesionario compromisos de cobertura social y mejora tecnológica como condición para nuevas extensiones futuras en plazos que se acotaron a 12 años, muy en la línea con los estándares internacionales.
El problema ahora con el nuevo paquete, amén de la lógica reacción de los legisladores, es que ni siquiera en la industria se han logrado los consensos necesarios para que la subsecretaría de Telecomunicaciones, que encabeza Jorge Álvarez Hoth, pueda seguir adelante con el proyecto que se ha venido preparando conforme a un análisis que se hizo sobre el asunto.
Debido a la prolongada ausencia de concesiones, más allá de lo que sucede en otros países, en México hay mucho más concesiones de amplitud modulada (AM) que de frecuencia modulada (FM). Para decirlo con exactitud, hay 380 de estas últimas contra 750 de las primeras. En total, el número de concesionarios de radio más o menos andaría en unos 850.
Se estima que en el espectro hay la posibilidad de otorgar poco más de 600 concesiones de radio. El paquete a discusión forma parte de ese universo.
Hoy será interesante lo que suceda al interior de la Cámara Nacional de la Industria de la Radio y la Televisión (CIRT), que encabeza el yucateco Alejandro García Gamboa. Y es que la intención es lograr durante un consejo directivo los acuerdos relacionados con el paquete de nuevas concesiones de radio y TV.
Hasta ahora, como es fácil de intuir, hay un nutrido grupo de radiodifusores muy interesados en que se den las condiciones para que la SCT pueda entregar ese paquete prácticamente en el horno.
Una de las más férreas opositoras al tema ha sido Televisa, de Emilio Azcárraga Jean. Parece que la entrega de nuevas concesiones rompería el equilibrio que hoy tiene dicho consorcio en ese negocio, en donde se maneja con Radiópolis, que lleva Raúl Rodríguez, aliado al Grupo PRISA.
Por supuesto una condición sine qua non para que la SCT pueda entregar las concesiones es que se puedan lograr ciertos acuerdos en la industria, si no por consenso, sí por votación, que es lo que se buscará empujar este martes en el consejo ya mencionado, que por cierto será público.
Es evidente que la reunión promete. No será la primera vez que Televisa enfrentaría en la CIRT una posición decidida de los radiodifusores para destrabar temas de su interés a los que a su vez se ha opuesto la compañía más influyente en el ámbito televisivo.
En los próximos días tampoco se puede descartar una reacción mucho más enfática de algunos Diputados y Senadores entorno a las concesiones que entregaría la SCT de manera gratuita, que es como hoy estipula la ley, aunque por otro lado se ve difícil que pudieran impedirlo, considerando que ese tipo de temas son aún facultades reservadas para el Ejecutivo.
Como quiera, el consenso en la industria se antoja básico.
Alberto Aguilar, “Nombres, nombres y nombres”, Reforma, 9 de agosto.
Aunque se alborotó el avispero en la CIRT, que encabeza Alejandro García, con la posibilidad de que el actual gobierno entregue hasta 300 nuevas concesiones de radio la administración de Vicente Fox todavía no ha tomado una decisión al respecto. Técnicamente, la SCT que encabeza Pedro Cerisola podría poner en marcha el procedimiento bajo la actual ley para efectuar asignación directa,luego de un proceso de registro y evaluación de interesados, esto a través a de la subsecretaría a cargo de Jorge Álvarez Hoth. Sin embargo, los tiempos políticos para proceder con tema tan controvertido y que tiene la abierta oposición de Televisa, de Emilio Azcárraga Jean, los administrará el secretario de Gobernación Carlos Abascal.
Mauricio Flores, “Gente detrás del dinero”, Milenio, 10 de agosto.
El gobierno federal frenó la decisión de lanzar una convocatoria para que antes de que concluya este sexenio se programe la entrega de 260 nuevas concesiones de radio en todo el país, ya que el proceso podría generar una seria oposición por parte de legisladores, concesionarios y sociedad en general, quienes abrirían sospechas sobre los que saldrían beneficiados.
Fuentes cercanas a la industria explicaron que aunque la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) ha descartado que exista un programa oficial de entrega de nuevas concesiones, se tiene conocimiento de que 60 de ellas estarían comprometidas a favor de grupos experimentados y con años en el sector, en tanto que las 200 restantes se entregarían a otros grupos independientes y nuevos concesionarios.
Durante la reunión de consejo de la Cámara Nacional de la Industria de Radio y Televisión (CIRT) solamente dos de más de 300 concesionarios se pronunciaron a favor de la nueva apertura del sector y del otorgamiento de nuevas concesiones.
De acuerdo con documentos oficiales, el espectro radioeléctrico mexicano que administra la SCT para sistemas de radiodifusión sí tiene capacidad para 260 nuevas estaciones de Frecuencia Modulada en 134 localidades del país, siendo la zona metropolitana de Torreón la más beneficiada, pues tendría la oportunidad de abrir ocho nuevas emisoras que darían servicio a poco más de un millón de radioescuchas ubicadas en esa ciudad y en las localidades de Gómez Palacio y Lerdo en el estado de Durango.
Asimismo, las fuentes informaron que la reunión programada ayer en la residencia oficial de Los Pinos se pospuso para la próxima semana, pues antes de reunirse, los funcionarios federales han comenzado a solicitar información y a recabar opiniones entre los actuales concesionarios.
Además, quedó corroborada la unidad manifestada el pasado martes pasado en la reunión de la CIRT, que obligó al gobierno a replantear el proyecto de apertura.
A la reunión estaban convocados el jefe de la oficina de la presidencia para la Innovación Gubernamental, Ramón Muñoz; el subsecretario de normatividad de medios de la Secretaría de Gobernación, Enrique Aranda, y el subsecretario de comunicaciones Jorge Álvarez Hoth.
La CIRT exhortó en esta semana al gobierno federal a clarificar el proceso de entrega de nuevas concesiones, pues consideró que esta iniciativa evidenciaba algunas incógnitas sobre los procedimientos de asignación.
Nota de Hugo González, Milenio, 10 de agosto.
EN DEFINITIVA, LA intención que hay por parte del Gobierno de Vicente Fox para autorizar este año un paquete de nuevas concesiones de radio, unas 250 básicamente de FM, no se ve sencilla. Amén del ruido político, ni siquiera existen los consensos, no se diga en la industria, entre los miembros del negocio radiofónico.
La SCT, que lleva Pedro Cerisola, que es la que tiene el proyecto en sus manos, incluso tendrá dificultades para elegir de manera equitativa el reparto, dado que los grupos radiofónicos consolidados difícilmente aceptarían ser discriminados frente a la posibilidad de entregar un mayor número a otros con presencia más o menos reciente en aras de generar balances.
Aún se recuerda la polémica de 1994 en la época de Carlos Salinas durante la última entrega. Entonces Javier Pérez de Anda recibió 82 estaciones "combo", esto es para reconvertir de AM a FM. Más de un radiodifusor pegó el grito en el cielo y hoy buscarían impedir a toda costa una historia similar.
También Televisa, de Emilio Azcárraga, y TV Azteca, de Ricardo Salinas, han cuestionado el asunto debido a la falta de transparencia que habría en un proceso de entrega de concesiones al estilo del pasado.
No se descarta que entre los beneficiarios incluso haya miembros del PAN, aquellos que más se han distinguido por su apoyo a la administración vigente. Se habla de que más de uno, incluso de bote pronto, terminaría por comercializar el usufructo de la concesión radiofónica, lo cual también fue práctica común durante los regímenes priistas.
Otros serían los recién llegados al negocio que ven en este paquete una gran oportunidad para crecer. El ejemplo más ilustrativo que se menciona es el de Olegario Vázquez Raña, quien aparecería entre los agraciados por su cercanía a Martha Sahagún.
Incluso se habla de que algunos empresarios de medios también pudieran resultar favorecidos como el caso de Juan Francisco Ealy, de El Universal. Incluso periodistas de radio en lo individual.
Obvio, mucho de lo que se dice raya en el terreno de la especulación, puesto que las listas de los solicitantes se han manejado con especial confidencialidad por parte de la subsecretaría de Telecomunicaciones, que encabeza Jorge Álvarez Hoth.
Parece que una versión de las mismas se le presentó a Vicente Fox, quien primeramente buscó el punto de vista de la industria.
Fue así que Alejandro García Gamboa, presidente de la CIRT, convocó primero a una asamblea que luego se sustituyó por un consejo directivo, que fue el que ayer por la tarde se realizó en el Hotel Presidente, con las consecuentes disonancias de los ahí presentes.
Televisa, por ejemplo, en voz de Javier Tejado, amén de mencionar la falta de transparencia del proyecto de entrega de concesiones radiofónicas, solicitó también que la industria pidiera a la SCT información en torno al proyecto de la radio digital.
Otros cuestionaron los riesgos de que el expediente pueda motivar el que se retome en el Congreso con mayor vehemencia la discusión de una nueva ley de radio y TV que ha quedado pendiente, y que incluso era una especie de condición previa para la entrega de concesiones.
Otro elemento de negocios que se esgrime en la entrega de un paquete masivo de concesiones es el impacto que esto tendrá para algunas empresas debido al comportamiento estático de la publicidad en los últimos años, máxime la competencia del internet, la publicidad exterior y la prensa escrita.
Se hace ver que la industria radiofónica no ha crecido, amén de la limitada capacidad de inversión de la mayoría de los grupos, lo que sitúa a ese rubro desde el punto de vista tecnológico a una buena distancia del nivel que se tiene en otras latitudes, por supuesto con sus honrosas excepciones.
Así que el asunto del paquete de concesiones no se ve fácil y menos el obtener una posición consensuada de una industria que incluso en más de una ocasión ha estado a punto de escindirse al interior de la CIRT.
Alberto Aguilar, “Nombres, nombres y nombres”, Reforma, 10 de agosto.
AUNQUE ALGUNOS MIEMBROS de la CIRT habían recomendado a su presidente Alejandro García Gamboa que de plano no realizara un consejo directivo para analizar el tema del nuevo paquete de concesiones de radio, éste que busca entregar la SCT, que encabeza Pedro Cerisola, el yucateco se la jugó y se puede decir que le salió bien.
Ni siquiera una fractura en unos de sus pies, que le obligó a participar en una silla de ruedas, le hizo desistir. La reunión que se realizó el martes por la tarde en el Hotel Presidente en la ciudad de México, no tuvo desperdicio. Se prolongó por cinco horas y se apersonaron unos 240 pequeños radiodifusores, algunos de los cuales tuvieron la oportunidad de exponer sus puntos de vista.
Si en un momento dado hubo riesgos de una escisión en esa Cámara por el notorio distanciamiento de un grupo de radiodifusores de AM, anteayer se puede decir que, entre otras cosas, García Gamboa y su consejo dieron un paso relevante para una especie de conciliación en ese gremio, casi siempre lejano en sus posiciones con la televisión y los grandes grupos por un lado y los pequeños empresarios por el otro.
Fue Arturo Zorrilla como presidente del comité de nueva tecnología a quien le tocó describir el rezago que hay en la radiodifusión y por ende la urgencia para empujar la digitalización necesaria para que ese rubro se ubique en los retos de la multimedia, con los satélites, el internet y el MP3.
En Estados Unidos un 83 por ciento de las 12 mil estaciones de radio existentes están digitalizadas. Para los dueños de las AM el panorama no es muy bueno, puesto que los jóvenes se rehúsan a escuchar radio por esa vía y más con las nuevas tecnologías. Se mencionaron modelos de autos que ni siquiera cuentan con la banda AM.
Por unanimidad se aceptó llevar a un consejo consultivo que se tiene con SCT la petición para que con el Gobierno se comience a trabajar a la brevedad en ese tema.
Acto seguido se abrió la discusión para el asunto de las nuevas concesiones con la mayoría del consejo directivo de CIRT en el que participan José Luis Guash, Antonio Ibarra, Jaime Azcárraga, Arturo Laris, Javier Pérez de Anda, Francisco Ibarra, Javier Tejado, Adriana Aguirre, Tristán Canales, Diana Gómez y Jesús Orozco, por mencionar algunos.
Correspondió a García Gamboa evaluar pros y contras de la entrega de un paquete de unas 300 concesiones, labor a cargo de la subsecretaría de Telecomunicaciones, que encabeza Jorge Álvarez Hoth. No siempre fue brillante. De inmediato los empresarios de AM se manifestaron en contra de la medida debido a que el paquete básicamente es de FM. Ya de por sí ese segmento del negocio está desesperado. Algunos llegan a vender "spots" hasta en 5 pesos, y el gran problema es que el 66 por ciento de la industria radiofónica es AM, justo al revés de lo que sucede en países como Estados Unidos.
Por eso se retomó la propuesta del ex presidente de CIRT, Jorge Mendoza, de ir a la búsqueda de "combos" con SCT, esto es, la posibilidad de trasmitir simultáneamente en AM y FM.
Consecuentemente aceptarían nuevas concesiones, pero para privilegiar a los empresarios que están en la radio, básicamente en las zonas en donde hay espectro, que no es el caso del DF, Guadalajara y Monterrey.
Se exigiría al Gobierno una absoluta visibilidad del proceso, incluso con estudios socioeconómicos y encajada en una política de apoyo industrial. Las mismas Televisa, de Emilio Azcárraga, y TV Azteca, de Ricardo Salinas, se sumaron a la propuesta junto con otros grandes grupos radiofónicos que antes habían cuestionado la conveniencia del paquete.
Como le mencionaba, se hace ver que el universo actual de estaciones de FM es de 470 en el País, por lo que sumar 300 de golpe provocaría efectos nocivos para el mercado. Además se denunció que aún está pendiente un concurso para 39 estaciones que se realizó en el 2000 y para el que hubieron 900 solicitudes.
Parece que tampoco Segob, a cargo de Carlos Abascal, estaría del todo convencida de entregar concesiones en esta etapa del sexenio, pese a que es una realidad que hay un rezago notorio, dada la sequía de tantos años y el enorme número de estaciones concesionables de FM que podrían implicar un elemento modernizador de ese rubro.
Así que la industria, vía la CIRT, ya se manifestó y la pelota está del lado del Gobierno. Habrá que ver si al final existen las condiciones.
Alberto Aguilar, “Nombres, nombres y nombres”, Reforma, 11 de agosto.
La postura de la CIRT más o menos consensuada es permitir las famosas estaciones combos, pero siempre que se enfoque a pequeños radiodifusores. Hablamos de las AM que se convierten a FM. Sin embargo, lo que no aceptan de antemano los principales grupos de ese gremio, que lidera Alejandro García Gamboa, es que se beneficien aquellos fuertes, como Radio Fórmula, de Rogerio Azcárraga; Acir, de Francisco Ibarra; y no se diga Radiorama, de Adrián Pereda y Javier Pérez de Anda. Otro jugador en esa tesitura es Mario Vázquez Raña, que en el último año ha adquirido más de 40 estaciones de AM.
Darío Celis, “Tiempo de negocios”, Reforma, 11 de agosto.
LA POSICIÓN DE algunos miembros de la CIRT, que encabeza Alejandro García Gamboa, en cuanto a pretender acotar la entrega de concesiones de radio para el gremio con trayectoria y especialmente para el grupo que maneja AM, no es gratuita. Lo que sucede es que sí habría algunos periodistas y políticos ya aprobados como beneficiarios, así como empresarios de recién ingreso al negocio como Olegario Vázquez Raña. A éste, se asegura, se le tienen preparadas 45 concesiones.
Alberto Aguilar, “Nombres, nombres y nombres”, Reforma, 12 de agosto.
Olegario Vázquez Raña, y su hijo, Olegario Vázquez Aldir, sí planean trabajar junto con la CIRT, la Cámara Nacional de la Industria de Radio y Televisión, en el espinoso asunto del otorgamiento de concesiones de radio por parte del gobierno federal.
La semana pasada la CIRT dejó muy en claro que prefieren impulsar esquemas como la radio digital, donde cabrán nuevas frecuencias, o definir las posturas en base a los combos de estaciones de AM y FM, en lugar de aceptar nuevas concesiones con total discrecionalidad, lo cual dejaría a algunos concesionarios en desventaja frente a otros.
En este punto es donde Grupo Imagen, dirigido por Ernesto Rivera, se disciplina con lo dicho por la CIRT, presidida por Alejandro García Gamboa. Nos aseguran que ni buscan ni quieren ir contra la industria. Van a jugar tal como lo juegue el conjunto de concesionarios creyendo en el bienestar común de los propietarios de estaciones de radio.
Todo inició hace dos semanas, cuando poco a poco fue cobrando fuerza el rumor del nuevo otorgamiento de concesiones para radio. El otorgamiento de concesiones ha estado frenado desde hace dos sexenios. Ni con la presidencia de Zedillo con Carlos Ruiz Sacristán al frente de la SCT, ni con que el actual gobierno foxista, con Pedro Cerisola al frente de la SCT, se han otorgado concesiones de radio y televisión porque son consideradas totalmente discrecionales, y cuyo otorgamiento puede tomarse como de predilección para algún o algunos concesionarios.
El rumor era que Olegario Vázquez Aldir recibiría nuevas concesiones para su Grupo Imagen. Hasta se llegó a mencionar que recibiría cerca de 30 concesiones en FM.
José Yuste, “Negocios en activo”, Milenio, 15 de agosto.
Grupo Imagen claro que quiere nuevas concesiones. Actualmente, en la ciudad de México opera con dos estaciones, 90.5 y con 99.3 en FM, y cuenta con alcance nacional en varias ciudades del país, donde tiene muchas asociadas o ha comprada nuevas estaciones. Está dedicada a la radio hablada. Está compitiendo con grandes grupos de radio hablada, como Grupo Radio Fórmula que ha mantenido su liderato, W Radio donde están Televisa y Prisa, Radio Centro dirigido por Francisco Aguirre, o MVS-Monitor donde Joaquín Vargas tiene una alianza con el periodista José Gutiérrez Vivó, entre otros. En este sentido Grupo Imagen claro que quiere nuevas concesiones, sobre todo para su proyecto nacional.
Pero el mismo grupo nos asegura que ni será por la puerta de atrás, de manera discrecional, ni dándole la espalda a la industria, o sea a la CIRT.
Olegario Vázquez Aldir sí busca entrar de lleno a los medios de comunicación. Ha iniciado fuerte con la radio, pero también ha buscado mayor presencia en otros medios, incluido el televisivo donde llegó a tantear la posibilidad de quedarse con Canal 40 frente a los problemas financieros del canal.
En ese sentido, insisten, sí van a querer más concesiones, sobre todo de FM que es donde hoy en día existe una gran disputa. Pero lo querrían hacer en base a la ley y sin dar la espalda a la industria. Grupo Imagen despeja la sospecha: va con la CIRT.
José Yuste, “Negocios en activo”, Milenio, 15 de agosto.
Le referíamos la semana pasada que al interior de la CIRT, que preside Alejandro García Gamboa, hay cierto consenso para que las nuevas concesiones de radio se autoricen bajo el esquema de combos, siempre y cuando se den a los radiodifusores pequeños de AM que resienten con más fuerza la crisis económica derivada de la creciente competencia de las FM. Quien lleva la voz cantante es Roque Chávez, de Sinaloa, y que a últimas fechas creó la Asociación Nacional de Radiodifusores, elevando el riesgo de una escisión. Con él van Pepe Pérez y José Laris. Presionan vía el Consejo Consultivo, que preside Enrique Pereda.
Darío Celis, “Tiempo de negocios”, Reforma, 15 de agosto.
En los últimos días corrió como el agua la supuesta pretensión de la SCT de concursar o bien entregar por asignación directa, mediante el esquema "combo" (frecuencias de FM para concesionarios de AM), un paquete de más de 250 concesiones de radio.
No es la primera vez que se habla sobre el tema. Al menos en otras dos ocasiones del actual sexenio se ha filtrado entre diversos columnistas la información de que era inminente la entrega de nuevas frecuencias de radio, pero transcurrieron los días sin ninguna confirmación del gobierno.
La semana pasada una nueva versión relativa a que una propuesta de entrega de nuevas concesiones estaba lista en el escritorio del titular de la SCT, Pedro Cerisola y Weber, provocó que en una asamblea extraordinaria de la Cámara Nacional de la Industria de Radio y Televisión (CIRT) se abordara el asunto para asumir una posición consensuada.
Como era de esperarse, los radiodifusores reunidos el pasado miércoles 10 de agosto apoyaron en general la idea de que la SCT no concurse, como establece la ley, las frecuencias, para evitar que por la discrecionalidad imperante en el procedimiento haya favoritismos hacia determinados grupos radiofónicos o bien hacia nuevos empresarios del sector, sin el pleno consentimiento de los concesionarios actuales.
En su lugar, apoyaron la idea de que las nuevas frecuencias se otorguen bajo la asignación directa en "combo", pero eso sí, aclararon, mediante un proceso totalmente transparente, consensuado, que considere la situación socioeconómica y de mercado de los municipios en los cuales operarían las emisoras.
Evidentemente las "combo" no serían para nuevos jugadores, sino para los actuales concesionarios, lo cual fortalecería la posición hegemónica de algunos grupos. En otros casos, debemos reconocerlo, podría significar un respiro importante para los pocos radiodifusores independientes (aunque no lo crea todavía existen) que operan sobre todo frecuencias de AM.
Gabriel Sosa Plata, “Análisis”, El Universal, 16 de agosto.
Es claro que los radiodifusores no cejarán en su lucha por obtener frecuencias "combo" y harán hasta lo imposible para que el gobierno de Vicente Fox ceda, pese a las consecuencias políticas que para el partido en el poder podría implicar un acto de esta naturaleza en tiempos preelectorales.
La SCT ha filtrado a la prensa la versión de que por lo anterior todo continuará indefinido y no habrá concesiones. Sin embargo, conocemos las habilidades de los empresarios de la radiodifusión para alcanzar sus objetivos cuando se lo proponen, como cuando acabaron con 12.5% del tiempo fiscal (el famoso "decretazo"), realizaron a espaldas de la sociedad un nuevo reglamento de Ley Federal de Radio y Televisión de acuerdo con sus intereses y lograron postergar la discusión y aprobación de una nueva ley.
Habrá que recordar que desde hace más de 10 años no se ha otorgado ninguna concesión en la radio y la única manera de acrecentar los grupos o incorporarse como nuevo empresario ha sido mediante la adquisición de emisoras, por las cuales precisamente por su escasez se pagan sumas enormes de dinero.
Ejemplos del alto valor que han alcanzado las emisoras de radio sobran. Por ejemplo, Radio Integral, SA de CV, empresa de Grupo ACIR propiedad de Francisco Ibarra, pagó el año pasado un millón 750 mil dólares por la emisora de AM XEEJ Radio Paraíso ubicada en Puerto Vallarta.
Se asegura que los nuevos empresarios del sector ofrecen hasta 5 millones de dólares por una emisora en plazas medianas como Celaya. Por supuesto en ciudades más importantes las cifras aumentan. La familia Fernández y sus socios, entre ellos Alfonso Romo, recibieron ¡50 millones de dólares! de manos del empresario Olegario Vázquez Raña por las tres emisoras que conforman grupo Imagen: Imagen 90.5, Radioactivo 98.5 hoy Reporte 98.5, en el DF, así como Imagen 107.7 en Monterrey.
Gabriel Sosa Plata, “Análisis”, El Universal, 16 de agosto.
Los movimientos en la radio han sido tan intensos en los últimos años que tan sólo en lo que va de la actual administración se han realizado 122 traspasos de concesión, de acuerdo con información de la SCT obtenida a través del Instituto Federal de Acceso a la Información (IFAI).
Al inicio del sexenio la SCT prometió un Programa Nacional de Concesiones y Permisos, según lo establecido en el Programa Sectorial de Comunicaciones y Transportes 2001-2006, gracias al cual se determinaría cuántas estaciones de radio y televisión podrían funcionar adicionalmente en el país. El Plan de Trabajo 2002 reitera que dicho programa estaría terminado entre junio y diciembre de 2002. Estamos por cumplir el quinto año de gobierno y continuamos en las mismas. Por eso es que hoy preguntamos al titular de la SCT: ¿hay una política clara en materia de radiodifusión? Es necesario que el gobierno hable con claridad al país sobre su percepción y lo que se busca en este sector de tanta importancia.
Gabriel Sosa Plata, “Análisis”, El Universal, 16 de agosto.
Ayer el titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, Pedro Cerisola, reconoció —ante el pícaro Tsumani que se avecina— que se han generado singulares rumores en la industria radiofónica alrededor de todo esto pero (siempre hay un pero) que la dependencia a su cargo no ha definido ningún paquete de concesiones para nuevas frecuencias de radio. Lo cual —hablando de las típicas verdades a medias foxistas— no es del todo cierto.
Antes de la renuncia del charro en declive, Santiago Creel, quien no se le olvide, ocupó la Secretaría de Gobernación, Pedro ya tenía su regalo listo con su listón, argumentando en corto a varios traviesos personajes, que Vicente Fox estaba más puesto que un calcetín para ponerse guapo con algunos concesionarios, y que todo era cuestión de tiempo. Y como shit usually happens, Santiago se fue y Carlos llegó, quien por órdenes de Fox, está encargado de hacer un análisis, digamos, más profesional sobre las consecuencias políticas en torno a todo este paquetón. You know what I´m saying?
Y como el horno definitivamente no está para bollos y la inquietud (ya para qué hablar de las presiones) crece en el simpático sector, Cerisola tuvo que salir (léase... tubazo) a atajar los lujuriosos ánimos declarando, literalmente que “... Efectivamente ha habido inquietud de la industria para ampliar las concesiones. Hay otras inquietudes de otros miembros de la industria para ampliar las concesiones, hay otras inquietudes de otros miembros de la industria que preferirían que no se ampliara...”. Como se dará cuenta mi estimado, un distintivo e ilustre discurso foxista siempre claro, preciso y puntual acerca... de las inquietudes, nerviosismos, molestias e impaciencias de algunos, so no matter what you do, you better hold your horses, boys.
Y remató amable lector, con las siguientes palabras “...A nosotros nos corresponde hacer un análisis de cuál es el uso y la asignación del espectro (el cual mi estimado, ya está listo) si esto sería posible y eventualmente si las condiciones se dan, etcétera (léase, we are in deep shit), podríamos proceder. Ahorita no hay una definición específica...”. El original mensaje es bastante claro y específico para aquellos que están muy entusiasmados sacando la calculadora sumando más frecuencias (or whatever) para sus respectivos grupos, among other things.
El meollo de la cuestión es que quizá no hay lugar para todos en el reventón y que, como otros en puerta, ya amenaza con salirse de control a pocos días del V Informe de Gobierno, donde la simpática labor de los medios electrónicos de comunicación, va de más decirle, es fundamental, esencial e imprescindible... Is that clear?
Marcela Gómez Zalce, “A puerta cerrada”, Milenio, 16 de agosto.
La compra-venta de emisoras de radio es una actividad en crecimiento debido a que el gobierno federal no ha otorgado concesiones en los últimos 10 años. El problema es que ante el encarecimiento, el valor de las radiodifusoras está sobredimensionado. Como comentamos en espacios anteriores, se están pagando fortunas por quienes desean incursionar en el medio o bien por los grupos radiofónicos que desean fortalecer su presencia en nuevas plazas.
Para quienes venden, han sido muy atractivos los ofrecimientos, en especial para los concesionarios de emisoras de AM, cuyas audiencias e ingresos por concepto de publicidad han mermado en los últimos años. Actualmente, sólo 30% de la inversión publicitaria que se destina a la radio llega a las estaciones de AM, pese a que hay más emisoras operando en esta banda.
De acuerdo con información proporcionada por la SCT, obtenida a través del Instituto Federal de Acceso a la Información (IFAI), estos traspasos se han realizado en 25 estados del país. Por banda, las autorizaciones han sido muy similares: 62 en AM y 60 en FM. ¿Cuánto dinero han implicado estas transacciones? Es un dato que evidentemente no proporciona la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT).
Por estado, Tamaulipas encabeza la lista, ya que ahí se han traspasado 17 emisoras. Le sigue Nuevo León con 15, Guerrero y Chihuahua con 10 cada uno, mientras que Baja California y Coahuila tienen, respectivamente, nueve movimientos. Más abajo están Veracruz, Guanajuato, Jalisco, Oaxaca y otros.
Gabriel Sosa Plata, “Análisis”, El Universal, 15 de septiembre.
La lista entregada por la SCT tampoco da cuenta de los verdaderos "adquirientes" de las emisoras, sino sólo de las personas morales y en muy pocos casos de las personas físicas a quienes se traspasó la concesión. En esta última situación entrarían los herederos de empresas titulares de concesiones de radio. El traspaso de estas 122 concesiones no significa que hayan pasado en su totalidad a nuevos dueños. Por ejemplo, Multimedios Estrellas de Oro, propiedad de la familia González, cambió la razón social de la mayor parte de sus emisoras. Lo hizo en 26 de las concesiones durante este periodo, para aglutinarlas sobre todo en tres empresas: Multimedios Radio, Radio Triunfos y Radio Informativa.
En otros casos, la información corrobora lo que se ha dicho en los últimos años: un engrandecimiento de los grupos radiofónicos actuales y una disminución de radiodifusores independientes, aquellos que hoy forman parte de Radio, AC y que se han convertido en un grupo de presión para la defensa de sus intereses en el organismo cúpula del sector, la Cámara Nacional de la Industria de Radio y Televisión (CIRT).
Con base en la lista, se puede afirmar que en estos cinco años Radiorama refrendó su primera posición en el listado de los grupos más oligopólicos de la radio al autorizarle el traspaso de 28 concesiones. Hoy Radiorama, propiedad de Javier Pérez de Anda y Adrián Pereda López, tiene más de 220 emisoras, la mayoría de éstas propias.
Otros grupos que no dejan de crecer son Organización Radio Fórmula, con cinco emisoras más, y Grupo ACIR con siete emisoras adicionales. En el listado también destaca la autorización para que Radiodifusoras Capital, propiedad de la familia Maccise, adquiriera el año pasado emisoras en Mexicali, Iguala, Zumpango del Río y la ciudad de México (la XELA). En Organización Impulsora de Radio (OIR), de la familia Aguirre, hubo movimientos en la operación de cinco de sus emisoras. El fortalecimiento de los oligopolios tiene otra consecuencia delicada: la desaparición de la radio local, con toda su riqueza cultural e informativa, y la unificación de contenidos a nivel nacional a través de los conceptos radiofónicos (Exa, Best FM, Los 40 Principales, etcétera).
Gabriel Sosa Plata, “Análisis”, El Universal, 15 de septiembre.
El vocero del presidente Vicente Fox, Rubén Aguilar, escribió en el más reciente número de la revista Este País: "… sería benéfica una reforma a la Ley Federal de Radio y Televisión que integre incentivos para un mejor desempeño de los medios. Esto sería posible si se promueve la competencia y se otorgan mayores garantías de transparencia en las concesiones...".
Sorprenden estas palabras, ya que uno de los actores políticos menos comprometidos con la modernización del marco legal de la radio y la televisión ha sido precisamente el gobierno federal. ¿O será que el presidente Fox y su vocero ya cambiaron de opinión?
Gabriel Sosa Plata, “Análisis”, El Universal, 15 de septiembre.
Existía la duda de si las televisoras abiertas, como TV Azteca (Ricardo Salinas) y Televisa (Emilio Azcárraga) iban a apoyar a los grupos radiofónicos en salvar las estaciones de AM, las cuales se encuentran en serias dificultades financieras, entre otras cosas, porque las AM se quedaron rezagadas tecnológicamente y con muy baja potencia.
Ante la crisis, los grupos radiodifusores buscan los combos, donde por una estación de AM puedan tener una de FM, y así replicar sus contenidos.
Los combos se han vuelto el grito de batalla de los radiodifusores, al grado de que el día del zafarrancho con Cerisola, el grito era: ¡queremos combos, queremos combos…!
Tanto Televisa como TV Azteca sí están apoyando la entrega de combos a los grupos radiofónicos. Desde el 9 de agosto pasado, en la asamblea del Hotel Nikko, los radiodifusores, apoyados por las televisoras, habían aprobado el punto de acuerdo de sacar adelante las AM. Incluso, desde la época donde Jorge Mendoza, directivo de TV Azteca, era presidente de la CIRT, ambas televisoras apoyaron los grupos radiofónicos, que al final también puede beneficiarles por tener estaciones de AM.
José Yuste, “Negocios en activo”, Milenio, 12 de octubre.
Sin embargo, algunos grupos radiofónicos no están de acuerdo en que las autoridades otorguen combos a los poseedores de estaciones de AM, sintiendo que va a ser una ayuda a unos y a otros no.
Es el caso de Multivisión, donde el mismo Joaquín Vargas, envió una carta a Jorge Alvarez Hoth, el subsecretario de Comunicaciones, para evitar el otorgamiento de combos.
Obviamente la postura de Multivisión se debe a su posesión de puras estaciones de FM, donde sienten que ellos han buscado y pagado más por las estaciones de Frecuencia Modulada.
Otro grupo que podría secundar a Multivisión es el Grupo Imagen, presidido por Olegario Vázquez Aldir, el cual también tiene puras estaciones de FM, y no necesita salvar ninguna de AM. Sin embargo, Imagen no ha hecho pública su postura.
José Yuste, “Negocios en activo”, Milenio, 12 de octubre.
El problema sigue allí. Varios grupos radiofónicos necesitan migrar de sus Am a FM, y lo pueden hacer a través de los combos. Pero otros grupos argumentan un trato desigual, sobre todo para favorecer a los tenedores de estaciones de AM.
Es lógico pensar que el tema ha molestado a Pedro Cerisola, secretario de Comunicaciones y Transportes, sobre todo después del zafarrancho en el que se vio envuelto. Pero aún así, las autoridades han estudiado el tema y no tienen nada definido, entre otras razones por haber lugares donde es imposible otorgar un estación más de FM, por estar saturada, como sucede con la ciudad de México, Guadalajara, Ciudad Juárez o Tijuana. Sin embargo, en las otras localidades todavía hay espectro para otorgar estaciones de FM. El problema es ¿cómo asignarlas?. La vía alternativa es lanzar la tecnología de radio digital para abrir el espectro. Pero todo parece irse hacia el próximo sexenio.
José Yuste, “Negocios en activo”, Milenio, 12 de octubre.
Siguen los jaloneos en la industria de la radio por la posibilidad de que se autoricen las famosas "combos", es decir: estaciones AM que simultáneamente puedan transmitir por FM. Y es que el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Radio y Televisión, Alejandro García Gamboa, acaba de enviarle a la SCT de Pedro Cerisola, una carta en la que solicita 70 "combos" para beneficiar a concesionarios de provincia, lo que provocó el enojo de varios asociados. Rogerio Azcárraga, de Grupo Fórmula, amagó con dejar la CIRT. Otros oponentes son Joaquín Vargas de MVS, Edilberto Huesca de NRM y Francisco Aguirre de Radio Centro. Lo paradójico del caso es que Azcárraga fue de los que más impulsó al yucateco García Gamboa para que presidiera la Cámara.
Darío Celis, “Tiempo de negocios”, Reforma, 14 de noviembre.
Fue hace exactamente una semana cuando se le cuestionó a Alejandro García Gamboa el envío de una solicitud de "combos" para 70 radiodifusores. El líder de la Cámara de la Radio y Televisión argumentó que lo hizo a petición del Presidente Vicente Fox. Lo cierto es que el haber actuado a espaldas del Consejo generó un profundo descontento al interior de ese gremio. Ya le contábamos ayer que radiodifusores como Rogelio Azcárraga, de Fórmula; Joaquín Vargas, de MVS; y Francisco Aguirre, de Radio Centro, manifestaron su extrañeza. Pero no fueron los únicos. Prácticamente toda la Cámara lo hizo.
Darío Celis, “Tiempo de negocios”, Reforma, 14 de noviembre.
Ayer hubo consejo directivo en la Cámara de la Industria de la Radio y la Televisión (CIRT) y el tema de las combos volvió a caldear los ánimos de los presentes. Hubo quienes pidieron abiertamente la renuncia del presidente Alejandro García, a lo que otros se opusieron enfáticamente. Al yucateco se le sigue recriminando la forma en que redactó la carta de solicitud de las 73 combos. Lo que quedó evidente fue el amplio respaldo que la industria de la radio sigue concediendo a su dirigente.
Darío Celis, “Tiempo de negocios”, Reforma, 23 de noviembre.
0 Responses to "Concesiones 2005"
Publicar un comentario