Cambios en la SIEDO por sobornos del narco

El procurador general de la República, Eduardo Medina Mora, anunció que la SIEDO será reestructurada debido a que el crimen organizado la infiltró, luego de comprobarse que altos funcionarios de esa área trabajaban para la organización criminal de los Beltrán Leyva.

El funcionario y la titular de la SIEDO, Marisela Morales, informaron ayer sobre la detención y consignación de Fernando Rivera Hernández, ex director general adjunto de Inteligencia, y cuatro personas, además del arraigo de un servidor público y la separación del cargo de 35 fiscales y agentes del Ministerio Público de la Federación.

A través de Rivera Hernández, quien también fue mayor de infantería en la Sedena, el cártel de Sinaloa obtuvo información privilegiada de las acciones que la PGR pretendía realizar contra esta banda desde 2004.

Más aún, el militar pudo tener acceso a informes de la Sedena y de las embajadas de España, Bolivia y Canadá, ya que Rivera Hernández se “movió ahí”, señalaron funcionarios de la PGR a MILENIO, luego de entregar una copia de los documentos que revelan el paso por diversas dependencias de este personaje, a quien los hermanos Beltrán Leyva pagaban entre 150 mil y 450 mil dólares por información que evitara su captura.

Autorización al Ejecutivo

Medina Mora sostuvo que solicitó al presidente Felipe Calderón autorización para llevar a cabo la reestructura de la SIEDO y aclaró que la denominada Operación Limpieza aún no termina.

Sin embargo, el procurador precisó que ex servidores públicos como José Luis Santiago Vasconcelos y Noé Ramírez Mandujano no son investigados. “En este momento no hay indicios que permitan indicar una responsabilidad de otras personas, salvo las que han sido consignadas, pero la investigación no ha terminado”, expresó.

La captura del grupo coludido con el narco derivó de las declaraciones de un testigo protegido que está Estados Unidos, quien manifestó que servidores y ex servidores públicos adscritos a la SIEDO formaban parte del cártel de Sinaloa desde 2004.

De acuerdo con la documentación entregada a MILENIO, entre 1982 y 2007 Rivera Hernández estaba adscrito a la Dirección de Infantería de la Sedena, mientras en la PGR se desempeñó como primer comandante de 1997 a 2003.

A partir del 1 de junio de 2004 pasó a formar parte de la SIEDO. A partir del 1 de mayo de 2005 y durante cuatro meses se especializó en instalaciones del Estado Mayor Presidencial, protección de funcionarios y explosivos.

Según los documentos, en 2006 comenzó a recibir capacitación y adiestramiento en las embajadas de España y Bolivia en México sobre temas de delincuencia organizada. También viajó a Guatemala y en la embajada española fue adiestrado en cuestiones de pandillas.

También se trasladó a Canadá, donde la Real Policía Montada lo capacitó en el análisis y gestión policial. Su bachillerato lo finalizó en el Heroico Colegio Militar.

Entre los detenidos también se encuentra el coordinador general técnico de la SIEDO, Miguel Colorado González, El viejito del cielo, quien se encargaba de asignar al personal de la AFI las solicitudes de indagatorias, por lo que tenía acceso a información de operativos programados contra diversas organizaciones criminales.

Contra él se ejerció una orden de detención provisional con fines de extradición a Estados Unidos. Ambos permanecían arraigados desde agosto y fueron internados en el penal de máxima seguridad de Occidente (Puente Grande), luego de que un juez de Jalisco libró las órdenes de aprehensión.

Rubén Mosso, Milenio, 28 de octubre.