ZACATECAS.- La violencia ha provocado que se reduzca el número de migrantes que recibe el país, sostuvo ayer Cecilia Romero, comisionada del Instituto Nacional de Migración.
"El flujo de centroamericanos, podría dar los datos de año 2006, fueron 182 mil indocumentados asegurados, y en 2007 fueron 120 mil. Sí ha bajado mucho el número.
"En este año, hasta el primer semestre iban poco más de 50 mil, nosotros sí creemos que va a ser aún más bajo el número", indicó en entrevista, tras participar en una de las mesas de la Octava Semana Binacional de Salud.
La funcionaria descartó que esta situación obedezca a la crisis económica que sufre Estados Unidos, sino a los niveles de violencia en México y al clima antiinmigrante que hay desde hace varios meses en la Unión Americana.
"Hay muchas razones, una de ellas es que las medidas antimigrantes en Estados Unidos han influenciado a muchos, que ven más complicado el paso.
"Otra razón puede ser que el tránsito mismo por México se haya complicado desgraciadamente por la situación de inseguridad, los asaltos y los secuestros que se han incrementado en el país", dijo.
En cuanto a la crisis económica, adelantó que sus efectos en la migración comenzarán a ser más evidentes durante el próximo año.
Con relación a los connacionales que fueron repatriados de EU durante este año, Romero descartó que se haya detectado algún cambio en el número, pero sí advirtió un cambio en el perfil.
"Están siendo deportados muchos mexicanos del interior de los Estados Unidos", señaló.
"El flujo de centroamericanos, podría dar los datos de año 2006, fueron 182 mil indocumentados asegurados, y en 2007 fueron 120 mil. Sí ha bajado mucho el número.
"En este año, hasta el primer semestre iban poco más de 50 mil, nosotros sí creemos que va a ser aún más bajo el número", indicó en entrevista, tras participar en una de las mesas de la Octava Semana Binacional de Salud.
La funcionaria descartó que esta situación obedezca a la crisis económica que sufre Estados Unidos, sino a los niveles de violencia en México y al clima antiinmigrante que hay desde hace varios meses en la Unión Americana.
"Hay muchas razones, una de ellas es que las medidas antimigrantes en Estados Unidos han influenciado a muchos, que ven más complicado el paso.
"Otra razón puede ser que el tránsito mismo por México se haya complicado desgraciadamente por la situación de inseguridad, los asaltos y los secuestros que se han incrementado en el país", dijo.
En cuanto a la crisis económica, adelantó que sus efectos en la migración comenzarán a ser más evidentes durante el próximo año.
Con relación a los connacionales que fueron repatriados de EU durante este año, Romero descartó que se haya detectado algún cambio en el número, pero sí advirtió un cambio en el perfil.
"Están siendo deportados muchos mexicanos del interior de los Estados Unidos", señaló.
Margarita Vega, enviada, Reforma, 7 de octubre.
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