El presidente venezolano, Hugo Chávez, suspendió ayer un convenio de suministro de combustible subsidiado a Colombia, y denunció una “incursión militar” colombiana en Venezuela, en el marco de la crisis bilateral a raíz de los acuerdos militares que negocian Bogotá y Washington, para que tropas de EU utilicen siete bases del ejército colombiano para combatir al narcotráfico.
“Este tema del suministro de combustible a Colombia, ¡que se acabe ya!”, expresó Chávez, quien reiteró que mantiene “congeladas” las relaciones con el gobierno del presidente colombiano, Álvaro Uribe, pese a que ordenó el retorno a Bogotá de su embajador, Gustavo Márquez.
Según datos de la petrolera colombiana Ecopetrol, Colombia compra a la estatal Petróleos de Venezuela SA (PDVSA) unos 4.5 millones de galones de gasolina mensuales, destinados a los mercados de Cúcuta y del departamento de la Guajira, ambos fronterizos con Venezuela, mediante un acuerdo subsidiado que vencerá el 21 de agosto.
“¡Abajo el comercio!” Chávez argumentó que su gobierno no puede “estar favoreciendo al gobierno de Uribe”, que lanza “agresiones y provocaciones” contra Caracas, con la venta de gasolina y otros productos petroleros con ventajas comerciales.
“El comercio, abajo, las compras de Venezuela a Colombia, abajo”, reiteró Chávez, en concordancia con pronunciamientos anteriores, como la suspensión de la compra este año de 10 mil vehículos nuevos a Colombia.
Las compras venezolanas a Colombia representaron el 15 por ciento del total de las importaciones del país en 2008, en el marco de un intercambio comercial bilateral que al cierre de ese mismo año alcanzó los siete mil 700 millones de dólares.
Chávez lamentó que sectores colombianos se vean afectados por las medidas restrictivas venezolanas, pero señaló que la “culpa” es de Uribe, el cual, sostuvo, supuestamente se presta a los planes imperiales de “invadir” Venezuela para apoderarse de su riqueza petrolera.
“Este tema del suministro de combustible a Colombia, ¡que se acabe ya!”, expresó Chávez, quien reiteró que mantiene “congeladas” las relaciones con el gobierno del presidente colombiano, Álvaro Uribe, pese a que ordenó el retorno a Bogotá de su embajador, Gustavo Márquez.
Según datos de la petrolera colombiana Ecopetrol, Colombia compra a la estatal Petróleos de Venezuela SA (PDVSA) unos 4.5 millones de galones de gasolina mensuales, destinados a los mercados de Cúcuta y del departamento de la Guajira, ambos fronterizos con Venezuela, mediante un acuerdo subsidiado que vencerá el 21 de agosto.
“¡Abajo el comercio!” Chávez argumentó que su gobierno no puede “estar favoreciendo al gobierno de Uribe”, que lanza “agresiones y provocaciones” contra Caracas, con la venta de gasolina y otros productos petroleros con ventajas comerciales.
“El comercio, abajo, las compras de Venezuela a Colombia, abajo”, reiteró Chávez, en concordancia con pronunciamientos anteriores, como la suspensión de la compra este año de 10 mil vehículos nuevos a Colombia.
Las compras venezolanas a Colombia representaron el 15 por ciento del total de las importaciones del país en 2008, en el marco de un intercambio comercial bilateral que al cierre de ese mismo año alcanzó los siete mil 700 millones de dólares.
Chávez lamentó que sectores colombianos se vean afectados por las medidas restrictivas venezolanas, pero señaló que la “culpa” es de Uribe, el cual, sostuvo, supuestamente se presta a los planes imperiales de “invadir” Venezuela para apoderarse de su riqueza petrolera.
EFE en Caracas, Crónica, 10 de agosto.
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