“No existen las condiciones para avanzar en el Legislativo con una propuesta de reforma migratoria”, afirmó el embajador de México en Estados Unidos, Arturo Sarukhan.
Al término de la reunión bilateral que sostuvieron los presidentes Felipe Calderón y Barack Obama —en el Instituto Cabañas—, antes de la Cumbre de Líderes de América del Norte, el diplomático minimizó las opiniones que ha externado un legislador demócrata para que se congelen los recursos de la Iniciativa Mérida, bajo la premisa de que en el combate al narcotráfico se violan los derechos humanos.
“En el Senado estadunidense no hay un movimiento amplio de opinión para congelar parte de los recursos de la Iniciativa Mérida”, aclaró Sarukhan, quien señaló que se trata de un “legislador que ha manifestado sus inquietudes”.
En torno a la reforma migratoria, el diplomático mencionó que en Estados Unidos la prioridad en el Legislativo es avanzar en la reforma en materia de salud; la segunda prioridad es la reforma en materia energética y en última instancia se encontraría la reforma migratoria.
Se trata de una ruta crítica establecida por el presidente Obama, en la que la reforma migratoria tiene una oportunidad de noviembre a marzo, dijo.
“Si el resto de la agenda legislativa en Estados Unidos, en el Congreso, se mueve en dirección correcta, podría abrirse un espacio; pero evidentemente hoy por hoy esa reforma migratoria, en este momento, no está lista para ser presentada al Congreso estadunidense”, señaló.
El embajador mencionó que si bien una hora es poco tiempo para discutir la amplia variedad de temas que atañen a la agenda bilateral, se tocaron otros asuntos importantes, como el virus de la influenza A/H1N1.
En este sentido, ambos mandatarios acordaron estrechar la cooperación y establecieron el compromiso de compartir las evaluaciones del virus para enfrentarlo en otoño e invierno.
De acuerdo con la Presidencia de la República, el presidente Calderón planteó a Obama la necesidad de llegar a una solución que dirima de manera definitiva el conflicto del autotransporte en la frontera, dado el impacto que éste tiene en el desarrollo comercial, los costos a consumidores, la competitividad regional y la generación de empleo en ambas naciones.
Al término de la reunión bilateral que sostuvieron los presidentes Felipe Calderón y Barack Obama —en el Instituto Cabañas—, antes de la Cumbre de Líderes de América del Norte, el diplomático minimizó las opiniones que ha externado un legislador demócrata para que se congelen los recursos de la Iniciativa Mérida, bajo la premisa de que en el combate al narcotráfico se violan los derechos humanos.
“En el Senado estadunidense no hay un movimiento amplio de opinión para congelar parte de los recursos de la Iniciativa Mérida”, aclaró Sarukhan, quien señaló que se trata de un “legislador que ha manifestado sus inquietudes”.
En torno a la reforma migratoria, el diplomático mencionó que en Estados Unidos la prioridad en el Legislativo es avanzar en la reforma en materia de salud; la segunda prioridad es la reforma en materia energética y en última instancia se encontraría la reforma migratoria.
Se trata de una ruta crítica establecida por el presidente Obama, en la que la reforma migratoria tiene una oportunidad de noviembre a marzo, dijo.
“Si el resto de la agenda legislativa en Estados Unidos, en el Congreso, se mueve en dirección correcta, podría abrirse un espacio; pero evidentemente hoy por hoy esa reforma migratoria, en este momento, no está lista para ser presentada al Congreso estadunidense”, señaló.
El embajador mencionó que si bien una hora es poco tiempo para discutir la amplia variedad de temas que atañen a la agenda bilateral, se tocaron otros asuntos importantes, como el virus de la influenza A/H1N1.
En este sentido, ambos mandatarios acordaron estrechar la cooperación y establecieron el compromiso de compartir las evaluaciones del virus para enfrentarlo en otoño e invierno.
De acuerdo con la Presidencia de la República, el presidente Calderón planteó a Obama la necesidad de llegar a una solución que dirima de manera definitiva el conflicto del autotransporte en la frontera, dado el impacto que éste tiene en el desarrollo comercial, los costos a consumidores, la competitividad regional y la generación de empleo en ambas naciones.
Cecilia Téllez en Guadalajara, Crónica, 10 de agosto.
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