LA HABANA (DPA y AP).— El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, mantiene la misma política hacia Cuba que sus 11 antecesores, incluyendo el “genocida” embargo comercial y financiero, denunció ayer el diario oficial Granma.
Desde que Obama llego al poder, su gobierno impuso multas por más de 365 mil dólares a empresas que se atrevieron a comerciar con Cuba, señaló Randy Alonso, uno de los principales voceros de las autoridades isleñas, en un artículo publicado por el rotativo, en el que subrayó que “el cambio preconizado por Barack Obama poco tiene que ver con la relación de Estados Unidos y Cuba”.
“El bloqueo continúa su engranaje asfixiante; los cinco (cubanos acusados de conspirar para cometer espionaje) siguen presos injustamente; la Ley de Ajuste permanece como aliento criminal a la emigración ilegal”, se quejó Alonso.
Añadió que, “además, Obama condecora a mercenarios por sus servicios al imperio y Hillary (Clinton) proclama condiciones para un diálogo”. “¿Dónde está el cambio cuando se habla de Cuba?”, se preguntó el presentador del programa televisivo Mesa Redonda, en el cual se suelen fijar posiciones gubernamentales.
“Se reafirma la nula voluntad de la Casa Blanca para eliminar una irracional política que es condenada por la casi totalidad de las naciones”, concluyó.
Desde que asumió la Presidencia, Obama se ha inclinado por una política de diálogo hacia países como Irán, Corea del Norte y Cuba e incluso habló de la necesidad de iniciar una nueva era en las relaciones con la isla. Sin embargo, el régimen cubano insiste en que lo que La Habana quiere son hechos, no palabras, y en que un diálogo no debe estar condicionado a que el país abandone el socialismo.
DPA y AP, El Universal, 8 de agosto.
Desde que Obama llego al poder, su gobierno impuso multas por más de 365 mil dólares a empresas que se atrevieron a comerciar con Cuba, señaló Randy Alonso, uno de los principales voceros de las autoridades isleñas, en un artículo publicado por el rotativo, en el que subrayó que “el cambio preconizado por Barack Obama poco tiene que ver con la relación de Estados Unidos y Cuba”.
“El bloqueo continúa su engranaje asfixiante; los cinco (cubanos acusados de conspirar para cometer espionaje) siguen presos injustamente; la Ley de Ajuste permanece como aliento criminal a la emigración ilegal”, se quejó Alonso.
Añadió que, “además, Obama condecora a mercenarios por sus servicios al imperio y Hillary (Clinton) proclama condiciones para un diálogo”. “¿Dónde está el cambio cuando se habla de Cuba?”, se preguntó el presentador del programa televisivo Mesa Redonda, en el cual se suelen fijar posiciones gubernamentales.
“Se reafirma la nula voluntad de la Casa Blanca para eliminar una irracional política que es condenada por la casi totalidad de las naciones”, concluyó.
Desde que asumió la Presidencia, Obama se ha inclinado por una política de diálogo hacia países como Irán, Corea del Norte y Cuba e incluso habló de la necesidad de iniciar una nueva era en las relaciones con la isla. Sin embargo, el régimen cubano insiste en que lo que La Habana quiere son hechos, no palabras, y en que un diálogo no debe estar condicionado a que el país abandone el socialismo.
DPA y AP, El Universal, 8 de agosto.
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