BUENOS AIRES.— Dos nuevos muertos (ya suman tres) y más de 70 heridos es el resultado de una protesta de indígenas en diversas regiones de Colombia y la represión policial, al intentar liberar las carreteras en el segundo día de movilizaciones y cortes que amenazan con extenderse por el país “hasta que el presidente (Álvaro Uribe) venga a dialogar con nosotros”.
Por segundo día consecutivo las etnias indígenas del departamento sureño de Cauca bloquearon la carretera Panamericana, vital para el comercio y la comunicación con Ecuador, donde en enfrentamiento con las fuerzas del orden, que al igual que en la víspera intentó desalojar la ruta, terminó con dos muertos y más de 40 heridos, según la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC).
En la mañana un policía fue tomado como rehén y a partir de ahí la situación se desbordó de tal manera que los explosivos y proyectiles de los manifestantes fue respondido con gases y presuntamente armas de fuego.
La tercera víctima se registró en otra protesta similar en el departamento de Risaralda, donde un niño de cinco años falleció por la asfixia provocada por los gases lacrimógenos. Entre los heridos, hay por lo menos una decena de policías. Según el director de Seguridad Ciudadana, general Orlando Páez, hay evidencias de que “existen elementos terroristas entre los manifestantes y tenemos evidencias de que presionaron a los indígenas”.
En el mismo sentido, el ministro de Agricultura, Andrés Arias, dijo que “todos los colombianos vemos cómo detonan explosivos, además, de cuando acá alguien puede detener un miembro de la Fuerza Pública ¿y si eso no es terrorismo entonces qué es ...? Estoy seguro que hay una infiltración terrorista”.
Mientras la protesta se expande a ciudades como Huila y Cauca, en Bogotá el líder indígena Berito Cobaría, de la etnia Uwa, amenazó con “no levantar los bloqueos hasta que el presidente venga a hablar con nosotros”. Las etnias reclaman que el gobierno cumpla la resolución oficial para la devolución de sus tierras y que se respete la autonomía de las comunidades indígenas.
La viceministra del Interior, María Isabel Nieto, explicó que el despeje de la carretera, aún con violencia, “es necesario porque no vamos a permitir que se tomen medidas de fuerza”. En cuanto a la posible presencia de las FARC en la protesta, el presidente de la ONIC, Luis Andrade, dijo que “no soy la persona indicada para decir que están infiltrados por la guerrilla”
Por segundo día consecutivo las etnias indígenas del departamento sureño de Cauca bloquearon la carretera Panamericana, vital para el comercio y la comunicación con Ecuador, donde en enfrentamiento con las fuerzas del orden, que al igual que en la víspera intentó desalojar la ruta, terminó con dos muertos y más de 40 heridos, según la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC).
En la mañana un policía fue tomado como rehén y a partir de ahí la situación se desbordó de tal manera que los explosivos y proyectiles de los manifestantes fue respondido con gases y presuntamente armas de fuego.
La tercera víctima se registró en otra protesta similar en el departamento de Risaralda, donde un niño de cinco años falleció por la asfixia provocada por los gases lacrimógenos. Entre los heridos, hay por lo menos una decena de policías. Según el director de Seguridad Ciudadana, general Orlando Páez, hay evidencias de que “existen elementos terroristas entre los manifestantes y tenemos evidencias de que presionaron a los indígenas”.
En el mismo sentido, el ministro de Agricultura, Andrés Arias, dijo que “todos los colombianos vemos cómo detonan explosivos, además, de cuando acá alguien puede detener un miembro de la Fuerza Pública ¿y si eso no es terrorismo entonces qué es ...? Estoy seguro que hay una infiltración terrorista”.
Mientras la protesta se expande a ciudades como Huila y Cauca, en Bogotá el líder indígena Berito Cobaría, de la etnia Uwa, amenazó con “no levantar los bloqueos hasta que el presidente venga a hablar con nosotros”. Las etnias reclaman que el gobierno cumpla la resolución oficial para la devolución de sus tierras y que se respete la autonomía de las comunidades indígenas.
La viceministra del Interior, María Isabel Nieto, explicó que el despeje de la carretera, aún con violencia, “es necesario porque no vamos a permitir que se tomen medidas de fuerza”. En cuanto a la posible presencia de las FARC en la protesta, el presidente de la ONIC, Luis Andrade, dijo que “no soy la persona indicada para decir que están infiltrados por la guerrilla”
José Vales, corresponsal, El Universal, 16 de octubre.
0 Responses to "Chocan policías e indígenas en Colombia"
Publicar un comentario