No había pasado una hora de la aprobación de los dictámenes de la reforma energética, cuando el secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño, salió a fijar la postura oficial:
“El gobierno federal está satisfecho con lo aprobado y además siente que hay una buena parte de lo que en su propuesta original estaba planteado, que ha sido retomado y recogido en los dictámenes aprobados por los senadores”.
Subrayó que el contenido de la reforma –“que se aprobó prácticamente por consenso”– cumple con lo que marca la Constitución, la cual, dijo, no se tocó.
–¿Salió adelante la propuesta del presidente Felipe Calderón? –se le preguntó.
–La propuesta del señor Presidente, al igual que las demás, fue discutida y debatida. Lo importante para nosotros, desde el principio, era poner en la mesa que existía un problema muy grave en México con el sector de los hidrocarburos que deberíamos abordarlo con toda objetividad y que debería ser resuelto por los legisladores –respondió.
El escenario próximo
A pregunta expresa sobre lo que podría ocurrir en los próximos días, cuando la Cámara de Diputados discuta y vote los dictámenes, Mouriño declaró: “Vemos un escenario en el que el Poder Legislativo continúa funcionando a pesar –insisto– de quienes pretenden violentar o de quie-nes pretenden impedir el trabajo del Poder Legislativo. Estamos obligados a garantizar que un poder más del Estado mexicano funcione y pueda llevar a cabo sus sesiones de trabajo como ocurrió en el Senado”.
El secretario de Gobernación arribó ayer a Bucareli muy temprano. Desde las 6:30 horas ya estaba en sus oficinas y en el transcurso de la mañana recibió, en primera instancia, al secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna –quien coordinó el operativo de seguridad en torno a la Torre del Caballito–, y luego, con Georgina Kessel, secretaria de Energía, siguió el debate en el Senado.
–Manuel Espino, ex dirigente del PAN, dijo que no fue aprobada la reforma de Calderón sino la de la oposición...
–Se aprobó una reforma de consenso, que es integral desde la perspectiva de que no nada más atiende el problema de los hidrocarburos y de Pemex, sino otros temas relevantes. Se aprobó una reforma que recoge el punto de vista del Presidente y de su partido, pero que toma en consideración –para construir esta mayoría de consenso– los puntos de vista, las aportaciones importantes de otras fuerzas políticas.
“El gobierno federal está satisfecho con lo aprobado y además siente que hay una buena parte de lo que en su propuesta original estaba planteado, que ha sido retomado y recogido en los dictámenes aprobados por los senadores”.
Subrayó que el contenido de la reforma –“que se aprobó prácticamente por consenso”– cumple con lo que marca la Constitución, la cual, dijo, no se tocó.
–¿Salió adelante la propuesta del presidente Felipe Calderón? –se le preguntó.
–La propuesta del señor Presidente, al igual que las demás, fue discutida y debatida. Lo importante para nosotros, desde el principio, era poner en la mesa que existía un problema muy grave en México con el sector de los hidrocarburos que deberíamos abordarlo con toda objetividad y que debería ser resuelto por los legisladores –respondió.
El escenario próximo
A pregunta expresa sobre lo que podría ocurrir en los próximos días, cuando la Cámara de Diputados discuta y vote los dictámenes, Mouriño declaró: “Vemos un escenario en el que el Poder Legislativo continúa funcionando a pesar –insisto– de quienes pretenden violentar o de quie-nes pretenden impedir el trabajo del Poder Legislativo. Estamos obligados a garantizar que un poder más del Estado mexicano funcione y pueda llevar a cabo sus sesiones de trabajo como ocurrió en el Senado”.
El secretario de Gobernación arribó ayer a Bucareli muy temprano. Desde las 6:30 horas ya estaba en sus oficinas y en el transcurso de la mañana recibió, en primera instancia, al secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna –quien coordinó el operativo de seguridad en torno a la Torre del Caballito–, y luego, con Georgina Kessel, secretaria de Energía, siguió el debate en el Senado.
–Manuel Espino, ex dirigente del PAN, dijo que no fue aprobada la reforma de Calderón sino la de la oposición...
–Se aprobó una reforma de consenso, que es integral desde la perspectiva de que no nada más atiende el problema de los hidrocarburos y de Pemex, sino otros temas relevantes. Se aprobó una reforma que recoge el punto de vista del Presidente y de su partido, pero que toma en consideración –para construir esta mayoría de consenso– los puntos de vista, las aportaciones importantes de otras fuerzas políticas.
Alonso Urrutia, La Jornada, 24 de octubre.
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