ELECCIONES EN MICHOACÁN 2ª PARTE: 2. LOS PARTIDOS POLÍTICOS.

En este rubro agrupamos veinte comentarios de los 72 sistematizados. Ocho, 40%, se refieren al Partido de la Revolución Democrática. Nueve, 45% giran en torno al Partido Acción Nacional. Los últimos cinco, 5% restante, se refieren al Partido Revolucionario Institucional y a Jesús Reyna, su candidato toda vez que, como señalamos en la Presentación, únicamente se generó un comentario sobre su candidatura.

EL PARTIDO DE LA REVOLUCIÓN DEMOCRÁTICA.
Tanto en los hechos como en el seguimiento previo, resulta claro que la elección en Michoacán es crucial para el Partido de la Revolución Democrática. Ocho comentarios sobre el tema se suman a los que sistematizamos hace dos semanas.

EN EL PRD dicen que la abierta confrontación entre Ruth Zavaleta y Gerardo Fernández Noroña tiene su verdadero epicentro en las elecciones para gobernador en Michoacán.
CUENTAN que cuando en Los Pinos vieron que el panista Salvador López ya no tenía oportunidad de ganarle al perredista Leonel Godoy, buscaron al gobernador Lázaro Cárdenas y a su papá Cuauhtémoc para hacerles una propuesta.
Y, SEGÚN ESTO, negociaron con los Cárdenas aceptar el triunfo del PRD en Michoacán sin impugnaciones, a cambio de que el ala perredista que ellos representan reconociera públicamente a Felipe Calderón como el Presidente constitucional.
AL DARSE ese reconocimiento con las recientes declaraciones del propio Cuauhtémoc Cárdenas, de Leonel Godoy y de Ruth Zavaleta, el ala lópezobradorista acusó recibo y pasó a la ofensiva, lo que explica los excesos verbales de Fernández Noroña.
EN ESE BIZARRO escenario, ya nomás falta que los pejistas declaren espurio ¡a su propio candidato en Michoacán!
Fray Bartolomé, “Templo Mayor”, Reforma, 28 de noviembre.

Según las encuestas más recientes, el PRD conservará la gubernatura de Michoacán. Si se concreta el triunfo en la jornada electoral del próximo domingo 11 de noviembre, será la única noticia buena que en materia electoral reciba el partido del sol azteca desde la infausta noche del 2 de julio del 2006. El resultado impactará la correlación de fuerzas al interior del PRD y la vinculación de este partido con el gobierno de Felipe Calderón; oriundo, por cierto, de la ciudad de Morelia.
Juan Manuel Asai, “Códice”, Crónica, 1º de noviembre.

Si cae Michoacán, y puede caer, ¿qué futuro le queda a la izquierda electoral mexicana? A una izquierda que no supo adecuarse al hecho de que Andrés Manuel López Obrador no logró llegar, porque a la mala no lo dejaron, a la Presidencia. A una izquierda que pese a ser la segunda mayoría política del país ha encadenado, una tras otra, derrotas electorales en los procesos celebrados de 2006 para acá.
No me sumo al linchamiento mediático del PRD. No caigo en ese juego. El debate, así sea recio, ríspido, es la esencia de una organización democrática que se dice de izquierda. Pero el debate de altura, no los patéticos dimes y diretes de quienes defienden un puesto en la nómina; de quienes conciben ahora la lucha social sólo como la defensa de una cuota de poder. Que corran a Michoacán y ya, con Godoy, López Obrador y Cárdenas. Que se callen la boca Noroña y Ruth. Que se decrete una tregua en las pugnas intestinas. No hay tiempo que perder porque: ¿si cae Michoacán?, ¿si cae Michoacán?...
Epigmenio Ibarra, Milenio, 2 de noviembre.

Ese es el corazón de la disputa. Por lo pronto, en la escala inmediata que tiene enfrente el PRD está la elección de Michoacán —que se llevará a cabo el domingo venidero—, en la que un sector de los amarillos parece obligado a transitar por el primero de los caminos: el de la reconciliación social —al reconocer la legalidad del gobierno de Calderón— y de los acuerdos políticos precisamente frente a la disputa de Michoacán. Ese grupo es el que integran Los Chuchos y la dinastía fundacional de los Cárdenas. Así, por una razón que sólo se explica por la vía de los acuerdos políticos, las de Michoacán son las primeras elecciones locales en las que por muchos años no existen acusaciones mutuas de fraude, de elección de Estado, a pesar de fallas técnicas en el proceso.
De esa manera, frente al pragmatismo mostrado por Los Chuchos y la dinastía Cárdenas en torno a las elecciones de Michoacán —que renovará el gobierno y el Congreso estatales y los ayuntamientos—, y ante la urgencia de que el PRD designe a los árbitros de la elección en la que renovará su dirigencia nacional, el señor López Obrador reaccionó con un doble golpe de espectacularidad. Primero lanzó a sus “fieras” contra los perredistas que apelaron a aceptar la legalidad del gobierno de Calderón —como fue el caso de los insultos de Gerardo Fernández Noroña contra la diputada Ruth Zavaleta—, y luego mandó propalar la especie de que rompería con el PRD. El golpe y el chantaje
Ricardo Alemán, “Itinerario Político”, El Universal, 7 de noviembre.

Pero además, el PRD, el cardenismo y su aliado temporal, Los Chuchos, le habrían ganado una importante batalla a su adversario también temporal, López Obrador. La estrategia de la negociación pragmática, al estilo de los códigos de Carlos Castillo Peraza, ya fue utilizada por Calderón en las pasadas elecciones de Yucatán, en donde el Presidente sacrificó el gobierno de la península a cambio de una alianza con el PRI, acuerdo que le resultó positivo a Felipe Calderón porque consiguió el apoyo del tricolor para sus reformas en el Congreso. Hasta aquí, un eventual triunfo de Leonel Godoy del PRD, frente a Salvador López Orduña del PAN, reportaría beneficios para ambos partidos. ¿Y dónde queda el PRI?
Ricardo Alemán, “Itinerario Político”, El Universal, 8 de noviembre.

Michoacán era el punto clave del neocardenismo. Y ahí el PRD se dividió, definió la candidatura de un político con tentaciones represivas al estilo priista y pareció haberse agotado la vena política e ideológica del cardenismo porque Godoy ya cambió de lealtades. Y lo grave no son las oscilaciones personales, sino los proyectos: el de Cárdenas mira al futuro y el de López Obrador sólo mira a sí mismo.
Y el cardenismo no sólo perdió en Michoacán, ya perdió Michoacán. Y el responsable se llama Lázaro Cárdenas Batel.
Carlos Ramírez, “Indicador Político”, El Financiero, 9 de noviembre.

Este fin de semana en Michoacán mucho está en juego para el PRD. Nada bien le ha ido en los procesos electorales del año como para que el domingo se sume a esa cadena de derrotas uno de sus bastiones históricos. Michoacán será el tercer gobierno estatal que se renueve este año. El primero fue Yucatán y el PRI se lo arrebató al PAN. El segundo fue Baja California y el PAN no se lo soltó al PRI.
Este 2007 ha habido otras elecciones de alcaldías y Congresos locales en las que el partido del sol azteca muy poco o casi nada ha ganado. En Zacatecas, por ejemplo, sufrió una sonada caída, no obstante ser una entidad que gobierna
Raúl Rodríguez Cortés, “Gran Angular”, El Gráfico, 9 de noviembre.

El proceso interno del PRD quedó marcado por el enfrentamiento de Cárdenas y López Obrador, aunque al final las dos tendencias apoyan a Godoy, postulado también de distintas maneras por Convergencia y el PT (que sólo en esa entidad pudieron reconstituir, aunque sin ese nombre, la coalición Por el Bien de Todos), y por Alternativa Socialdemócrata. A última hora el candidato del Partido Verde declinó a favor del perredista, aunque no es seguro que puedan conducir en su provecho el 3 por ciento de los votantes que se proponían sufragar por él. López Obrador reconoció el indeclinable liderazgo local de los Cárdenas y para no revivir la querella interna alrededor de su candidatura hizo mutis en Michoacán, sin que eso implique ruptura y ni siquiera distancia con Godoy que, en cambio, recompuso su dolida relación con los Cárdenas, con quienes co- laboró en los gobiernos del Distrito Federal y Michoacán.
Miguel Ángel Granados Chapa, “Plaza Pública”, Reforma, 9 de noviembre.

EL PARTIDO ACCIÓN NACIONAL.
También para Acción Nacional es importante la contienda en Michoacán, como lo hacíamos notar en la entrega previa. En esta segunda parte nueve comentarios se refieren al tema.

Prácticamente la totalidad de los gobernadores panistas, más Manuel Espino y el ex Francisco Salazar, confirmaron ya su presencia este sábado en Morelia, en un evento organizado para apuntalar la campaña de Salvador López Orduña a la gubernatura de Michoacán, cuyo desenlace se considera “de pronóstico reservado”.
Enrique Aranda Pedroza, “De naturaleza política”, Excélsior, 31 de octubre.

Manuel Espino estuvo en Michoacán y sólo abrió la boca para complicar la elección del candidato panista a gobernador, al señalar que coincide con Vicente Fox en cuanto a que “habrá que esperar a que se sepa quién es Manlio Fabio Beltrones y la supuesta investigación que hizo la DEA”. Dijo que las declaraciones del ex presidente son respetables y además afirmó que conoce muy bien al sonorense.
Ubaldo Díaz, “Escenario Político”, Crónica, 1º de noviembre.

Significativa en verdad, la presencia ayer en Michoacán, en apoyo del candidato del blanquiazul a la gubernatura, Salvador Chavo López Orduña, del gobernador de Jalisco, Emilio González; del de Guanajuato, Juan Manuel Oliva, y el de Morelos, Marco Adame, encabezados por el jefe nacional Manuel Espino
Enrique Aranda Pedroza, “De naturaleza política”, Excélsior, 4 de noviembre.

Los senadores panistas también fueron a Michoacán a externar su apoyo. Santiago Creel Miranda y José González Morfín, dijeron que estaban en Morelia para “significar la unidad del panismo. Estamos apoyando a nuestro candidato, expresando el apoyo que le dan los legisladores de Acción Nacional”.
Ubaldo Díaz, “Escenario Político”, Crónica, 6 de noviembre.

Sin embargo, nos hace ver que en Michoacán, más que la presencia de gobernadores vecinos a la entidad, como Juan Manuel Oliva o de Ángel Espino, cuentan más las ausencias, que verdaderamente fueron notorias. Como ejemplo está, que no acudió el secretario de la Función Pública Federal, así como el secretario del presidente Felipe Calderón, César Nava, al igual que los diputados locales y de varios senadores. Argumentan que estuvieron en otros actos de campaña.
Ubaldo Díaz, “Escenario Político”, Crónica, 7 de noviembre.

Además, nos hacen ver que hubo mucha gente, pero poca convocatoria, no se vieron las banderas azules del panismo. Lo más seguro es que les falte empuje en la tierra del general Lázaro Cárdenas del Río. Y en Puebla van por el mismo camino, inclusive nos hacen ver que perderán presencia. Manuel Espino está sentenciado a ser el dirigente nacional que más procesos electorales perdió en la época moderna.
Ubaldo Díaz, “Escenario Político”, Crónica, 7 de noviembre.

Nos platican que el domingo, en el avión de línea que iba a Morelia, viajaba Manuel Espino y lo hacía en completa soledad, nadie le hacía plática. Cómo se ve que su futuro es incierto. Más tarde, en el mitin de López Orduña, todos los políticos que se encontraban en el templete “le hicieron el vacío”.
Ubaldo Díaz, “Escenario Político”, Crónica, 7 de noviembre.

Claro, si no es que pasa algo extraordinario como que los votantes mintieran u ocultaran sus verdaderas intenciones. Pero no todo es pérdida para el PAN que tiene niveles históricos de intención de voto en un estado que por donde uno lo vea es cardenista.
Y es que no hay manera de competir contra toda la infraestructura que los connotados Cárdenas tienen en el estado luego de todos los familiares que lo han gobernado: Lázaro Cárdenas, Dámaso Cárdenas, Cuauhtémoc Cárdenas y claro, el gobernador saliente, nieto del primero y con su mismo nombre: Lázaro Cárdenas Batel
Katia D’Artigues, “Campos Elíseos”, El Universal, 7 de noviembre.

De esa forma, el ex secretario de la Función Pública, quedó como candidato único y virtual presidente del CEN del PAN, cargo para el que será electo en diciembre próximo. A Martínez Cázares no le gustó ir solo en la contienda, quería un acompañante, para presumir la democracia panista.
Pero nos dicen que el michoacano ya actúa como dirigente de su partido, ante la desaparición del todavía “líder” Manuel Espino Barrientos. Y por lo mismo, Cázares se echó encima el compromiso de sacar adelante la victoria de Salvador López Orduña, que no es una tarea fácil.
Ubaldo Díaz, “Escenario Político, Crónica, 9 de noviembre.

PARTIDO REVOLUCIONARIO INSTITUCIONAL.
Tal como sucedió en la primera sistematización, el Partido Revolucionario Institucional y Jesús Reyna, su candidato, se mantienen alejados de la mirada de columnistas y articulistas, como lo muestran los siguientes tres comentarios.

El PRI escogió a Jesús Reyna García en un intento por salvar la presidencia municipal de Morelia, pero no tiene un buen candidato a la gubernatura de Michoacán. El Tricolor tiene muchas posibilidades de alzarse con ese municipio.
Ubaldo Díaz, “Escenario Político”, Crónica, 30 de octubre.

Pero las diferencias partidistas no se olvidan. En Michoacán, la dirigente nacional del tricolor, Beatriz Paredes, recordó que su partido transformó las instituciones electorales y no desea que los comicios se conviertan cada vez en una disputa que fragmente y deje heridas en las familias, por lo que allí, en Michoacán, ofreció certidumbre, estabilidad y tranquilidad...
Miguel Ángel Rivera, “Clase Política”, La Jornada, 5 de noviembre.

La ganancia para el PRI se podría dar en dos centros reales de poder. Uno, el Congreso local, en donde a partir de sus triunfos se podría convertir en el “fiel de la balanza”. Y dos, porque son muchas las posibilidades de que consiga la victoria en la alcaldía de Morelia, la capital de Michoacán. En esta hipótesis, los tres grandes partidos resultarían gananciosos en una elección de inéditos. Y de última hora, en una jugada que parece de candado —para asegurar la victoria—, Leonel Godoy consiguió el apoyo del siempre congruente Partido Verde —lo que se interpreta como una concesión del PRI—, votos con los que podría garantizar el triunfo. Lo único cierto es que la elección será muy cerrada, y que ante un triunfo de los amarillos, nadie saldrá gritando “fraude, fraude”.
Ricardo Alemán, “Itinerario Político”, El Universal, 8 de noviembre.

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