Escapar de Cuba, con todo pagado

MIAMI.— El futbolista Yosniel Mesa escribió el hasta ahora último capítulo de las deserciones de deportistas cubanos, pero la historia recoge cientos de nombres a partir de 1962, cuando se eliminó el profesionalismo en la isla.

Oriundo de la central provincia de Cienfuegos, Mesa, de 27 años, escapó en la madrugada del viernes, después del desafío que México le ganó 5-0 a Cuba y cuando la delegación se encontraba alojada en Charlotte, Carolina del Norte.

Mesa, quien asistió a dos Mundiales de futbol de la FIFA, protagonizó la huida a través de una escalera de incendio en el hotel Holiday Inn en Charlotte.

“Fue un poco difícil porque los entrenadores estaban en el lobby del hotel”, recordó. “Llevaba un vaso en la mano porque si me veían podía decir que iba por hielo”.

El relato es similar al de otros deportistas que lograron escapar de la isla o abandonar escuadras nacionales en tierras foráneas.

Su tío Julio explicó que hizo el recorrido en automóvil desde Miami a Charlotte para poder saludar a Mesa. Reseñó que durante el medio tiempo del encuentro frente a México su sobrino le hizo una señal que comprendió a la perfección.

Al concluir el desafío, Julio siguió al autobús del equipo cubano y esperó durante varias horas en las afueras del hotel.

Dos horas después, parpadearon las luces de una habitación en el octavo piso. Era el aviso esperado.

“Resultó un momento muy emotivo”, comentó Julio. “Acá añorábamos que él hiciera eso, pero no podíamos presionarlo, porque se trata de una decisión muy personal. Cuando Yosniel entró al vehículo sentí una emoción indescriptible”.

El tema de las deserciones ha sido una constante en cada delegación cubana que viaja al exterior, aunque las autoridades toman medidas para que en sus filas estén sólo los más “confiables”.

También en Copas de Oro tomaron el camino de Mesa, Rey Ángel Martínez y Alberto Delgado en 2002 y Maykel Galindo en 2005, así como Lester Moré y Osvaldo Alonso en 2008. El atacante Galindo integra el FC Dallas y Alonso los Sounders de Seattle, ambos en la MLS.

Otros siete futbolistas se quedaron en Tampa, estado de Florida, durante el Preolímpico con miras a los Juegos de Beijng en 2008, igualmente con el deseo de “probarse en el deporte profesional”. Cuba no permite que sus deportistas firmen contratos en el exterior, ni asistan a certámenes en otro país en forma individual.

Cualquier intento en ese sentido es sancionado con la exclusión de las escuadras locales o nacionales e incluso puede conducir a la cárcel.

René Arocha, un exitoso lanzador en las Grandes Ligas, abrió la brecha en 1991, pero posteriormente otros también saltaron a las Mayores como Orlando El Duque Hernández, su hermano Liván, Ariel Prieto, José Ariel Contreras, Rey Ordóñez y Danny Báez.

Entre las estrellas más recientes se encuentran Alexei Ramírez (Medias Blancas de Chicago), Kendry Morales (Angelinos de Los Angeles) y el supersónico Aroldis Chapman (Rojos de Cincinatti), quien el pasado año firmó contrato por más de 30 millones de dólares.



Morales pudo escapar de la isla tras varios intentos de fuga. Antes fue enviado de regreso a La Habana cuando competía en un torneo en Panamá y simultáneamente separado de los Industriales, el equipo más emblemático del país.

Chapman, quien asistió como primera figura al segundo Clásico Mundial, abandonó en 2009 un hotel en Rótterdam, Holanda, horas antes de lanzar antes de Taiwán. Después permaneció varios meses en Andorra hasta que obtuvo el jugoso contrato con Cincinatti.

“Mi sueño es jugar en las Grandes Ligas”, dijo Chapman en sus primeras entrevistas. “Desde hace mucho tiempo había tomado la decisión porque en Cuba había llegado al techo de las posibilidades”.

La carencia de beisbolistas cabales ha propiciado el revés de Cuba en las principales contiendas internacionales, entre ellas los Juegos Olímpicos en Pekín 2008, Campeonatos Mundiales y Copas Intercontinentales y los dos Clásicos mundiales.



Enorme también es la deserción en el boxeo, con incrementos sostenidos en los últimos años. Campeones mundiales y olímpicos como Yuriorkis Gamboa, Odlanier Solís, Guillermo Rigondeaux, Erislandy Lara y Yan Barthelemy forman parte de una generación reciente que triunfa en el profesionalismo.

“Quiero probarme y saber de lo que soy capaz”, dijo Rigondeaux, sancionado junto a Lara por tratar de desertar durante los Juegos Panamericanos disputados en Brasil en 2007.

El Universal, 15 de junio.

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