Las autoridades encargadas de impartir justicia en el Distrito Federal hacen su trabajo a medias.
Y es que las denuncias y detenciones de presuntos delincuentes van en aumento, pero las consignaciones disminuyen cada vez más.
Carmen Segura, presidenta de la Comisión de Seguridad de la Asamblea Legislativa, dijo que la situación es preocupante, porque no se está abatiendo la impunidad.
"Se está utilizando una estrategia que permite detener mucha gente, pero, al llegar al siguiente tramo, que es la investigación y formalización de las acusaciones, no se llega a soportar", afirmó la diputada panista.
En el último año, las averiguaciones previas ante la Procuraduría capitalina crecieron 9.6 por ciento, y el número de personas enviadas al Ministerio Público subió 23.3.
En contraste, el promedio diario de consignados ante los jueces penales o de paz penal bajó 9.3 por ciento, al pasar de 107 a 97 presuntos delincuentes enviados a un reclusorio.
"Hay muchas detenciones 'patito' (...) Es cierto que hay muchas remisiones, pero la mayoría se caen porque faltan pruebas. Muchas penden de un hilo porque sólo se sostienen de la imputación directa de una persona", argumentó un Ministerio Público de la Delegación Cuauhtémoc.
El segundo informe de actividades del Procurador Rodolfo Félix indica que, del 1 de abril de 2007 al 15 de abril de 2008, iniciaron 203 mil 281 indagatorias, un promedio diario de 533. Sin embargo, sólo 82 averiguaciones previas terminaron ante un juez penal o de paz penal.
En 54 por ciento de los casos, no se pudo determinar la identidad del responsable, y en 29 por ciento no hubo pruebas.
Samuel Hernández de Alba, catedrático del Instituto Nacional de Ciencias Penales, cuestionó la capacidad para integrar denuncias.
"Lo que están haciendo los MP es buscar la forma de mandar los expedientes al no ejercicio de la acción penal, más que procurar justicia. Esto pasa porque son pésimos. No tienen conocimientos jurídicos", aseguró.
Y es que las denuncias y detenciones de presuntos delincuentes van en aumento, pero las consignaciones disminuyen cada vez más.
Carmen Segura, presidenta de la Comisión de Seguridad de la Asamblea Legislativa, dijo que la situación es preocupante, porque no se está abatiendo la impunidad.
"Se está utilizando una estrategia que permite detener mucha gente, pero, al llegar al siguiente tramo, que es la investigación y formalización de las acusaciones, no se llega a soportar", afirmó la diputada panista.
En el último año, las averiguaciones previas ante la Procuraduría capitalina crecieron 9.6 por ciento, y el número de personas enviadas al Ministerio Público subió 23.3.
En contraste, el promedio diario de consignados ante los jueces penales o de paz penal bajó 9.3 por ciento, al pasar de 107 a 97 presuntos delincuentes enviados a un reclusorio.
"Hay muchas detenciones 'patito' (...) Es cierto que hay muchas remisiones, pero la mayoría se caen porque faltan pruebas. Muchas penden de un hilo porque sólo se sostienen de la imputación directa de una persona", argumentó un Ministerio Público de la Delegación Cuauhtémoc.
El segundo informe de actividades del Procurador Rodolfo Félix indica que, del 1 de abril de 2007 al 15 de abril de 2008, iniciaron 203 mil 281 indagatorias, un promedio diario de 533. Sin embargo, sólo 82 averiguaciones previas terminaron ante un juez penal o de paz penal.
En 54 por ciento de los casos, no se pudo determinar la identidad del responsable, y en 29 por ciento no hubo pruebas.
Samuel Hernández de Alba, catedrático del Instituto Nacional de Ciencias Penales, cuestionó la capacidad para integrar denuncias.
"Lo que están haciendo los MP es buscar la forma de mandar los expedientes al no ejercicio de la acción penal, más que procurar justicia. Esto pasa porque son pésimos. No tienen conocimientos jurídicos", aseguró.
Nota de Antonio Baranda, Reforma, 12 de mayo.
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