A petición de los gobernadores del PRI, legisladores del tricolor impulsarán en el Congreso una reforma para que Pemex pague un impuesto adicional por daño ambiental a las entidades en donde tiene instalaciones.
Sin embargo, para evitar que el término pueda afectar la imagen de su partido rumbo a las elecciones federales de 2009, dirigentes y legisladores acordaron "disfrazar" el término y demandar "compensaciones" a la paraestatal.
Para afinar los términos jurídicos de la propuesta, representantes de las entidades petroleras sostuvieron ayer una reunión privada en la que revisaron los proyectos de ley que defenderán en el Congreso.
"Existe consenso, hay apoyo del partido, de diputados y senadores, pero el planteamiento no se puede realizar de manera abierta, porque resultaría negativo que se pensara que al PRI no le interesa Pemex, sino solamente el dinero que pueden obtener los gobernadores para beneficiarse", explicó uno de los funcionarios estatales que trabaja en la propuesta.
De acuerdo con el estudio realizado por los estados petroleros gobernados por el tricolor, el riesgo por la producción y transporte de los hidrocarburos es muy elevado, mientras que los recursos con los que cuentan las entidades para enfrentarlos son prácticamente nulos.
Según el documento interno, el objetivo es que los estados obtengan recursos de un fondo especial, para ejecutar proyectos que permitan revertir los daños ambientales.
"En las entidades federativas donde Pemex realice actividades propias que impliquen riesgos al medio ambiente, ésta deberá pagar un derecho de carácter ambiental", dice uno de los proyectos.
La propuesta beneficiará a los estados donde la paraestatal tenga instalados ductos, refinerías, complejos procesadores de gas, terminales de almacenamiento y distribución, baterías de separación, pozos o cualquier otro que implique riesgo para la población y el medio ambiente.
Propuesta en duda
De acuerdo con legisladores priistas que asistieron a la reunión de la dirigencia nacional de su partido con el grupo de gobernadores, todavía está en duda la posibilidad de que el partido haga suya la propuesta de crear empresas petroleras que puedan asociarse con la iniciativa privada, para explotar hidrocarburos.
De acuerdo con la versión de diputados consultados, luego de que el Gobernador veracruzano Fidel Herrera presentó su proyecto, tanto mandatarios como legisladores advirtieron sobre los riesgos de apoyar el capital privado en los estados y rechazarlo para la inversión en Pemex a nivel nacional.
Por su parte, el presidente de la Comisión de Energía del Senado, Francisco Labastida, aseguró que la viabilidad jurídica y política de la propuesta será analizada por los grupos parlamentarios de su partido.
La intención es que el tricolor trabaje todo el fin de semana en la elaboración formal, para que el lunes sea presentada en el cónclave que tendrán la dirigencia nacional y los coordinadores parlamentarios con los 18 mandatarios priistas.
Sin embargo, para evitar que el término pueda afectar la imagen de su partido rumbo a las elecciones federales de 2009, dirigentes y legisladores acordaron "disfrazar" el término y demandar "compensaciones" a la paraestatal.
Para afinar los términos jurídicos de la propuesta, representantes de las entidades petroleras sostuvieron ayer una reunión privada en la que revisaron los proyectos de ley que defenderán en el Congreso.
"Existe consenso, hay apoyo del partido, de diputados y senadores, pero el planteamiento no se puede realizar de manera abierta, porque resultaría negativo que se pensara que al PRI no le interesa Pemex, sino solamente el dinero que pueden obtener los gobernadores para beneficiarse", explicó uno de los funcionarios estatales que trabaja en la propuesta.
De acuerdo con el estudio realizado por los estados petroleros gobernados por el tricolor, el riesgo por la producción y transporte de los hidrocarburos es muy elevado, mientras que los recursos con los que cuentan las entidades para enfrentarlos son prácticamente nulos.
Según el documento interno, el objetivo es que los estados obtengan recursos de un fondo especial, para ejecutar proyectos que permitan revertir los daños ambientales.
"En las entidades federativas donde Pemex realice actividades propias que impliquen riesgos al medio ambiente, ésta deberá pagar un derecho de carácter ambiental", dice uno de los proyectos.
La propuesta beneficiará a los estados donde la paraestatal tenga instalados ductos, refinerías, complejos procesadores de gas, terminales de almacenamiento y distribución, baterías de separación, pozos o cualquier otro que implique riesgo para la población y el medio ambiente.
Propuesta en duda
De acuerdo con legisladores priistas que asistieron a la reunión de la dirigencia nacional de su partido con el grupo de gobernadores, todavía está en duda la posibilidad de que el partido haga suya la propuesta de crear empresas petroleras que puedan asociarse con la iniciativa privada, para explotar hidrocarburos.
De acuerdo con la versión de diputados consultados, luego de que el Gobernador veracruzano Fidel Herrera presentó su proyecto, tanto mandatarios como legisladores advirtieron sobre los riesgos de apoyar el capital privado en los estados y rechazarlo para la inversión en Pemex a nivel nacional.
Por su parte, el presidente de la Comisión de Energía del Senado, Francisco Labastida, aseguró que la viabilidad jurídica y política de la propuesta será analizada por los grupos parlamentarios de su partido.
La intención es que el tricolor trabaje todo el fin de semana en la elaboración formal, para que el lunes sea presentada en el cónclave que tendrán la dirigencia nacional y los coordinadores parlamentarios con los 18 mandatarios priistas.
Nota de Claudia Guerrero, Reforma, 8 de mayo.
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