Todos los días, un promedio de 97 mexicanos menores de 18 años son deportados por el Gobierno de Estados Unidos, según cifras del Instituto Nacional de Migración (INM).
Todos ellos son canalizados a alguno de los 24 centros de la Red de Albergues de Tránsito.
En 2001, sólo el sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) recibió en sus albergues a 7 mil 620 infantes repatriados, para 2007 fueron 20 mil 878. Esto es un aumento de 173 por ciento en seis años.
Tan sólo en 2007, según el INM, 35 mil 543 niños y adolescentes de México fueron deportados, de los cuales, 8 mil 310 eran menores de 12 años y la mitad viajaban solos.
Una de las causas del aumento de niños que cruzan solos la frontera, según el INM, es que los indocumentados que viven en Estados Unidos han optado por pagar a los "polleros" para que pasen a sus hijos en lugar de visitarlos en México.
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) advierte que los niños, en su trayecto a Estados Unidos, son vulnerables a sufrir daños en la salud, ser capturados por redes del crimen organizado, ser sometidos a explotación sexual o laboral y perder la vida en el intento de reencontrarse con sus familiares.
Además, señala que los infantes frenan sus posibilidades de desarrollo puesto que se ven obligados a abandonar sus estudios.
Cuando los menores llegan a los albergues, la mitad pasa menos de un día en esos sitios y cerca del 3 por ciento, más de 10 días.
Pese al aumento migratorio infantil, en el primer semestre de 2008, se registró una reducción de 12 por ciento en comparación con el mismo periodo de 2007.
Todos ellos son canalizados a alguno de los 24 centros de la Red de Albergues de Tránsito.
En 2001, sólo el sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) recibió en sus albergues a 7 mil 620 infantes repatriados, para 2007 fueron 20 mil 878. Esto es un aumento de 173 por ciento en seis años.
Tan sólo en 2007, según el INM, 35 mil 543 niños y adolescentes de México fueron deportados, de los cuales, 8 mil 310 eran menores de 12 años y la mitad viajaban solos.
Una de las causas del aumento de niños que cruzan solos la frontera, según el INM, es que los indocumentados que viven en Estados Unidos han optado por pagar a los "polleros" para que pasen a sus hijos en lugar de visitarlos en México.
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) advierte que los niños, en su trayecto a Estados Unidos, son vulnerables a sufrir daños en la salud, ser capturados por redes del crimen organizado, ser sometidos a explotación sexual o laboral y perder la vida en el intento de reencontrarse con sus familiares.
Además, señala que los infantes frenan sus posibilidades de desarrollo puesto que se ven obligados a abandonar sus estudios.
Cuando los menores llegan a los albergues, la mitad pasa menos de un día en esos sitios y cerca del 3 por ciento, más de 10 días.
Pese al aumento migratorio infantil, en el primer semestre de 2008, se registró una reducción de 12 por ciento en comparación con el mismo periodo de 2007.
Reforma, 2 de diciembre.
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