BUENOS AIRES.— En plena etapa de reflexión electoral, y sin posibilidades ya de proselitismo alguno, el candidato oficialista, Juan Manuel Santos y el opositor, Antanas Mockus, ocuparon sus últimas apariciones públicas, antes de los comicios de mañana, para intentar contrarrestar las campañas negativas, después del último debate en el que ambos lucharon por atraer el voto de los otros candidatos.
Mientras Santos volvió a defenderse de las acusaciones de haber impulsado las ejecuciones de jóvenes haciéndolos pasar por guerrilleros de las FARC (“los falsos positivos”), Mockus intentó relativizar “la crítica positiva” de que no es un candidatobueno para Colombia sino “para un país europeo”, que le endilgan algunos de sus contrincantes.
“Yo no me inventé los ‘falsos positivos’. Nosotros no los inventamos sino que los acabamos, tomamos las decisiones que había que tomar. Fueron eficaces, totalmente transparentes”, explicó Santos.
El político respondió así al relator especial de Derechos Humanos de la ONU, Philip Alston, quien el jueves había dicho en Ginebra que durante el 2009, en virtud de su visita a Colombia, había observado “mejoras en materia de seguridad pero un patrón de ejecuciones extrajudiciales”, sobre los cuales 98.5% de los casos aún está impune.
En su informe recordaba que Santos fue el ministro de Defensa, cuando estalló el escándalo de “los falsos positivos”. En sus declaraciones ayer el aspirante presidencial, favorito para pasar a la segunda vuelta para definir con Mockus, reconoció que el documento dado a conocer por Alston “es duro” ya que “refleja una realidad que a mí me desgarró el corazón. Cuando descubrí que eso estaba sucediendo... fue tal vez uno de los golpes más duros que he sufrido en mi vida”.
Por su parte Mockus, volvió a contrarrestar la idea de que “es un buen candidato para Noruega o Finlandia” al decir que “en Fin- landia sobro pero aquí hago mucha falta”, en una entrevista televisiva y defendió la permanencia de los soldados estadounidenses en las siete bases militares colombianas, por los que en los últimos días de campaña se intentó reabrir la polémica.
Después de un debate en el que Santos intentó seducir al candidato del Polo Democrático, Gustavo Petro, quien lo acusó de pertenecer “a un gobierno que no respetó los derechos humanos”, Mockus, lució mejor en sus respuestas que en los primeros cruces televisivos. Si bien no se pueden conocer estudios de opinión, fuentes de diversas consultoras dijeron que “serán los indecisos”, lo que terminen volcando “un escaso porcentual” a favor de uno u otro candidato, descontando que todo se definirá en la segunda vuelta, el próximo 20 de junio.
Mientras Santos volvió a defenderse de las acusaciones de haber impulsado las ejecuciones de jóvenes haciéndolos pasar por guerrilleros de las FARC (“los falsos positivos”), Mockus intentó relativizar “la crítica positiva” de que no es un candidatobueno para Colombia sino “para un país europeo”, que le endilgan algunos de sus contrincantes.
“Yo no me inventé los ‘falsos positivos’. Nosotros no los inventamos sino que los acabamos, tomamos las decisiones que había que tomar. Fueron eficaces, totalmente transparentes”, explicó Santos.
El político respondió así al relator especial de Derechos Humanos de la ONU, Philip Alston, quien el jueves había dicho en Ginebra que durante el 2009, en virtud de su visita a Colombia, había observado “mejoras en materia de seguridad pero un patrón de ejecuciones extrajudiciales”, sobre los cuales 98.5% de los casos aún está impune.
En su informe recordaba que Santos fue el ministro de Defensa, cuando estalló el escándalo de “los falsos positivos”. En sus declaraciones ayer el aspirante presidencial, favorito para pasar a la segunda vuelta para definir con Mockus, reconoció que el documento dado a conocer por Alston “es duro” ya que “refleja una realidad que a mí me desgarró el corazón. Cuando descubrí que eso estaba sucediendo... fue tal vez uno de los golpes más duros que he sufrido en mi vida”.
Por su parte Mockus, volvió a contrarrestar la idea de que “es un buen candidato para Noruega o Finlandia” al decir que “en Fin- landia sobro pero aquí hago mucha falta”, en una entrevista televisiva y defendió la permanencia de los soldados estadounidenses en las siete bases militares colombianas, por los que en los últimos días de campaña se intentó reabrir la polémica.
Después de un debate en el que Santos intentó seducir al candidato del Polo Democrático, Gustavo Petro, quien lo acusó de pertenecer “a un gobierno que no respetó los derechos humanos”, Mockus, lució mejor en sus respuestas que en los primeros cruces televisivos. Si bien no se pueden conocer estudios de opinión, fuentes de diversas consultoras dijeron que “serán los indecisos”, lo que terminen volcando “un escaso porcentual” a favor de uno u otro candidato, descontando que todo se definirá en la segunda vuelta, el próximo 20 de junio.
José Vales corresponsal, El Universal, 29 de mayo.
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