Ausentismo, desencanto e incluso lágrimas de los priístas que no fueron palomeados


La coyuntura electoral sigue imperando en el Senado, donde ayer el tema central entre los priístas fueron las quejas de quienes quedaron fuera de las listas plurinominales. Los grupos parlamentarios presionan a los legisladores para que no falten a las sesiones, aunque se siguen justificando las faltas a buena parte de los que no se presentan.
Por otra parte, el panista Santiago Creel anunció que regresa a su escaño a partir de este viernes, después de una ausencia de siete meses en que estuvo dedicado de lleno a buscar la candidatura de Acción Nacional a la Presidencia de la República.
A su vez, el príísta Ramiro Hernández solicitó licencia para ausentarse por tiempo indefinido de sus tareas legislativas. Es la segunda vez que lo hace; la anterior fue para contender por la candidatura al gobierno de Jalisco, que no logró.
Durante la reunión plenaria de los senadores del PRI, el tema central fue la lista definitiva de candidatos plurinominales al Congreso, que un día antes acordó la dirigencia del Revolucionario Institucional. De acuerdo con versiones de varios asistentes, hubo quejas y lamentos de los integrantes de la bancada que quedaron fuera.
Entre ellos están los senadores Cleominio Zoreda Novelo y Raúl Mejía, a quienes se había prometido una diputación en la lista nacional, pero al final no se dio. Se dijo que a Mejía se le bajó de la contienda por el gobierno de Nayarit, a cambio de pasar a San Lázaro.
La mayoría de los priístas lamentó que la senadora María de los Ángeles Moreno tampoco haya sido incluida en esa lista, pese a su experiencia. La legisladora, a su vez, rechazó que vaya a salir del PRI y dejó en claro que no se abandona un partido por estar o no en un cargo, sino por el respeto a los principios.
Por su parte, la también senadora Guadalupe Fonz, quien tampoco quedó incluida para su pase automático a San Lázaro, incluso lloró.
Andrea Becerril y Víctor Ballinas, La Jornada, 2 de marzo.

0 Responses to "Ausentismo, desencanto e incluso lágrimas de los priístas que no fueron palomeados"