La única manera de blindar a la política y con ello evitar que las prácticas de corrupción principalmente estén dentro de las esferas gubernamentales, es darle a la ciudadanía el poder que se merece y con ello se logrará avanzar en la democracia, aseguró el secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont.
"La gran mayoría de los seres humanos en este mundo son gente decente, ansiosa de trabajar, de multiplicar espacios de oportunidad, de responder con dignidad a las necesidades personales y familiares, de responder a los demás con honradez y con honor. Si los gobiernos olvidamos los nutrientes éticos y políticos que le dan sentido; si no confía en que una ciudadanía bien organizada es la mejor defensa frente al abuso y a la corrupción, los gobiernos debilitan muchas de estas herramientas", detalló.
Al inaugurar la mesa redonda internacional: La democracia en una encrucijada: el reto del financiamiento ilícito de la política, organizado por el Gobierno Federal en conjunto con el Instituto para la Democracia y Asistencia Electoral (IDEA), el funcionario puntualizó que México ha emprendido una lucha por recuperar la integridad de sus instituciones públicas, con el fin de que el Estado pueda cumplir con sus deberes básicos de proteger a la comunidad.
Para ello, dijo, se ha tenido que interferir las relaciones de corrupción entre organizaciones criminales y elementos que trabajan para el Estado.
Gómez Mont detalló que el proceso democrático pasa por distinguir que las instituciones estatales cumplan con sus deberes frente a las organizaciones criminales y para ello es necesario que la fuerza del Estado esté subordinada a mandos democráticos, es decir, a personas electas mediante el sufragio universal directo y secreto.
Aprovechó para destacar que México es una "rarísima excepción en el mundo" en donde la reelección de legisladores o ayuntamientos está prohibida, espacios institucionales que hoy no gozan del mejor de los créditos sociales y que requieren de fortalecer sus vínculos con la ciudadanía, por ello la propuesta de que vayan a un nuevo periodo continuo de mandato.
Por su parte, Vidar Helgesen, Secretario General de IDEA, se refirió a la preocupación que existe a nivel mundial por la dupla que llega a existir entre la política y el financiamiento ilícito especialmente cuando se trata de crimen organizado, lo que pone en una encrucijada a la democracia.
La democracia, dijo, obtuvo grandes avances durante el 2009 pero ahora enfrenta desafíos sobre todo cuando se detectan manipulaciones en donde no se permite la vigilancia por parte del Legislativo hacia el Ejecutivo.
"Las instituciones democráticas, los partidos y los Parlamentos sufren una seria crisis pues aún cuando la confianza de los ciudadanos sigue siendo una situación crítica, la falta de ellos son una amenaza para la sustentabilidad de la democracia", comentó.
"La gran mayoría de los seres humanos en este mundo son gente decente, ansiosa de trabajar, de multiplicar espacios de oportunidad, de responder con dignidad a las necesidades personales y familiares, de responder a los demás con honradez y con honor. Si los gobiernos olvidamos los nutrientes éticos y políticos que le dan sentido; si no confía en que una ciudadanía bien organizada es la mejor defensa frente al abuso y a la corrupción, los gobiernos debilitan muchas de estas herramientas", detalló.
Al inaugurar la mesa redonda internacional: La democracia en una encrucijada: el reto del financiamiento ilícito de la política, organizado por el Gobierno Federal en conjunto con el Instituto para la Democracia y Asistencia Electoral (IDEA), el funcionario puntualizó que México ha emprendido una lucha por recuperar la integridad de sus instituciones públicas, con el fin de que el Estado pueda cumplir con sus deberes básicos de proteger a la comunidad.
Para ello, dijo, se ha tenido que interferir las relaciones de corrupción entre organizaciones criminales y elementos que trabajan para el Estado.
Gómez Mont detalló que el proceso democrático pasa por distinguir que las instituciones estatales cumplan con sus deberes frente a las organizaciones criminales y para ello es necesario que la fuerza del Estado esté subordinada a mandos democráticos, es decir, a personas electas mediante el sufragio universal directo y secreto.
Aprovechó para destacar que México es una "rarísima excepción en el mundo" en donde la reelección de legisladores o ayuntamientos está prohibida, espacios institucionales que hoy no gozan del mejor de los créditos sociales y que requieren de fortalecer sus vínculos con la ciudadanía, por ello la propuesta de que vayan a un nuevo periodo continuo de mandato.
Por su parte, Vidar Helgesen, Secretario General de IDEA, se refirió a la preocupación que existe a nivel mundial por la dupla que llega a existir entre la política y el financiamiento ilícito especialmente cuando se trata de crimen organizado, lo que pone en una encrucijada a la democracia.
La democracia, dijo, obtuvo grandes avances durante el 2009 pero ahora enfrenta desafíos sobre todo cuando se detectan manipulaciones en donde no se permite la vigilancia por parte del Legislativo hacia el Ejecutivo.
"Las instituciones democráticas, los partidos y los Parlamentos sufren una seria crisis pues aún cuando la confianza de los ciudadanos sigue siendo una situación crítica, la falta de ellos son una amenaza para la sustentabilidad de la democracia", comentó.
Ariadna García, Reforma, 2 de diciembre.
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