BOGOTÁ (Agencias).— La guerrilla colombiana de las FARC entregó en un video las pruebas de supervivencia de dos de los 22 efectivos que mantiene secuestrados, quienes pidieron a la comunidad internacional no olvidarse de la situación de los rehenes en ese país.
Las evidencias de vida del capitán de la Policía Javier Solórzano y el cabo del Ejército Salin San Miguel fueron entregadas al grupo de Colombianos por la Paz, que lidera la senadora Piedad Córdoba, quien ayer hizo público el video.
En la grabación, Solórzano, quien fue retenido por las FARC el 4 de junio de 2007, dijo que una posible mediación del presidente ecuatoriano, Rafael Correa, como lo está buscando su familia, podría facilitar su liberación. Solórzano, quien era comandante de la Policía del municipio de Florida al momento de su secuestro en una finca, pidió a su madre no llorar cuando le envíe mensajes radiales y contó que durante su cautiverio ha fabricado varias manillas, algunas de ellas para sus hijas.
Por su lado, el cabo San Miguel, quien fue retenido el 23 de mayo de 2008, envió mensajes a su familia y agradeció al grupo de Colombianos por la Paz por las gestiones que realiza para buscar su libertad.
“Mamá sé que sabes que yo soy el último de los canjeables, préstale a todas las madres de Colombia y a la comunidad internacional, préstales todo el apoyo, por haberse solidarizado con nuestra causa”, dijo el militar, quien mostró una muñeca de trapo que fabricó en la selva.
Ambos efectivos aparecen en el video, presuntamente grabado en julio, enfrente de una tela color militar y aparentan un buen estado de salud. Al conocer las pruebas, la familia de Solórzano se declaró feliz.
En otro contexto, la secretaria de Estado de EU, Hillary Clinton, y el canciller colombiano, Jaime Bermúdez, se reunirán hoy para hablar del acuerdo de cooperación militar que cerraron el viernes ambos países y que ha generado conflictos con Venezuela y Ecuador.
En el último capítulo de esta tensión, la cónsul general de Colombia en Venezuela, María Elvira Cabello, dijo ayer que el incidente por la detención el domingo de 50 colombianos que tramitaban su cédula de ciudadanía en Caracas se resolvió “en buenos términos”. Afirmó que la Cancillería venezolana les pidió disculpas y solicitó que para la próxima jornada de cedulación se tramite el permiso respectivo en el Ministerio de Interior y Justicia venezolano.
Las evidencias de vida del capitán de la Policía Javier Solórzano y el cabo del Ejército Salin San Miguel fueron entregadas al grupo de Colombianos por la Paz, que lidera la senadora Piedad Córdoba, quien ayer hizo público el video.
En la grabación, Solórzano, quien fue retenido por las FARC el 4 de junio de 2007, dijo que una posible mediación del presidente ecuatoriano, Rafael Correa, como lo está buscando su familia, podría facilitar su liberación. Solórzano, quien era comandante de la Policía del municipio de Florida al momento de su secuestro en una finca, pidió a su madre no llorar cuando le envíe mensajes radiales y contó que durante su cautiverio ha fabricado varias manillas, algunas de ellas para sus hijas.
Por su lado, el cabo San Miguel, quien fue retenido el 23 de mayo de 2008, envió mensajes a su familia y agradeció al grupo de Colombianos por la Paz por las gestiones que realiza para buscar su libertad.
“Mamá sé que sabes que yo soy el último de los canjeables, préstale a todas las madres de Colombia y a la comunidad internacional, préstales todo el apoyo, por haberse solidarizado con nuestra causa”, dijo el militar, quien mostró una muñeca de trapo que fabricó en la selva.
Ambos efectivos aparecen en el video, presuntamente grabado en julio, enfrente de una tela color militar y aparentan un buen estado de salud. Al conocer las pruebas, la familia de Solórzano se declaró feliz.
En otro contexto, la secretaria de Estado de EU, Hillary Clinton, y el canciller colombiano, Jaime Bermúdez, se reunirán hoy para hablar del acuerdo de cooperación militar que cerraron el viernes ambos países y que ha generado conflictos con Venezuela y Ecuador.
En el último capítulo de esta tensión, la cónsul general de Colombia en Venezuela, María Elvira Cabello, dijo ayer que el incidente por la detención el domingo de 50 colombianos que tramitaban su cédula de ciudadanía en Caracas se resolvió “en buenos términos”. Afirmó que la Cancillería venezolana les pidió disculpas y solicitó que para la próxima jornada de cedulación se tramite el permiso respectivo en el Ministerio de Interior y Justicia venezolano.
El Universal, 18 de agosto.
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