Descarta daño Grupo Televisa

Grupo Televisa aseguró ayer que la prohibición de compra de spots por parte de los partidos políticos no le afecta porque 97 por ciento de sus anunciantes son privados, según Alejandro Quintero, vicepresidente Corporativo de Comercialización.

No obstante, aseguró que el discurso de la "despotización" de las campañas es "mentirosón" y generará una deformación política.

Quintero aseguró que la reforma electoral aprobada por el Congreso triplicó el tiempo para la difusión de mensajes políticos.

Explicó que en los últimos tres meses de la campaña política de 2006, Televisa transmitió 4 mil 200 minutos en spots políticos y que la reforma pide la transmisión de 17 mil minutos, contando tiempos fiscales y del Estado.

"El discurso de la "despotización" de la democracia es un poco mentirosón, porque en realidad lo que están haciendo es triplicar los spots", insistió Quintero.

Además consideró que la reforma se planteó mal porque los anunciantes en los medios no compran minutos, sino audiencia.

No es lo mismo un minuto de Televisa, que tiene 70 por ciento de share (cuota de pantalla de televisión) que un minuto con el canal 22, dijo.

"No hay una distribución equitativa de las audiencias, eso va a generar una deformación, porque ¿a quién le van a dar los mejores minutos con carga de audiencia?", cuestionó.

Ante representes de agencias de publicidad y agentes de medios, advirtió que el IFE será el principal anunciante de México, ante el cual todas las agencias de publicidad tendrán que competir.

"Tenemos tres años para pensar qué hacer (antes de las elecciones políticas del 2009)", recalcó Quintero.

Sin embargo advirtió que no todo está dicho aún, pues la reforma requiere de la aprobación de al menos 16 Congresos estatales.

Antes de su intervención, fue presentado el nuevo modelo de publicidad "ImaginAcción", en donde Emilio Azcárraga Jean, presidente de Televisa, indicó que un buen concepto publicitario puede impulsar las ventas y con ello los empleos.

Agregó que hoy en día la publicidad no sólo es un negocio de volúmenes, ya que las audiencias son cada vez más exigentes.

Nota de Verónica Gascón, Reforma, 19 de septiembre.